Ecoagro

Se mira más a la tierra

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photo_camera Souto de castiñeiros en la provincia, una especie que gana en superficie cultivada. (FOTO: XESÚS FARIÑAS)
Las actividades ligadas al sector primario están reviviendo en la provincia. La imagen de una tierra sin cultivar aún pesa, pero ya tiene mucho de tópico. Crece el empleo en el sector, surgen nuevos modelos de negocio y los productos ganan mercado en la exportación.

En días pasados, con ocasión de la presentación de un nuevo informe del Observatorio Económico Ourensán de la Diputación, su coordinador, Andrés Mazaira, aludía la evolución de la ocupación en la industria de la alimentación, la actividad que más crece en empleo en términos trimestrales, "que consigue más  que duplicar su ocupación en el  último quinquenio, desde los 2.300 ocupados a los más de 5.600". El informe ponderaba una vez más las capacidades de este recurso en una provincia que nunca debió dejar de mirar a la tierra.

Exportación

Hay datos alentadores, incluso indicadores que marcan registros históricos. En exportaciones, por ejemplo, las ventas de animales vivos y productos del reino animal supusieron 68 millones de euros, el mejor dato en los últimos cuatro años. A ese epígrafe habría que añadir los 21,2 millones de euros exportados en el apartado de productos del reino vegetal, en la media de los últimos ejercicios. En el capítulo de grasas y aceites animales o vegetales se reportó un volumen exportado de 44,2 millones de euros, cuatro millones más que el ejercicio anterior. Cierra el capítulo de las exportaciones del sector primario los 30,5 millones en vinos y demás productos alcohólicos, superando los 29,6 del año anterior. Es decir, las ventas exteriores totales del sector primario sumaron 164 millones, representando un 18,7% de todas las exportaciones de la provincia.

Producciones agrícolas

También recuperan su lugar las principales producciones agrícolas, que en algunos artículos experimentan un crecimiento sostenido en el último quinquenio. En el 2019 se recolectaron 204.393 toneladas, el mejor dato desde el 2016. La vendimia del año pasado, según datos de la Xunta, supuso la recolección de 35.736 toneladas de uva para vino, el mejor dato de las últimas cuatro cosechas. En términos similares se puede analizar cultivos de huerta, con 23.166 toneladas de coles y repollo (6.000 toneladas más que el año anterior), las 20.000 de tomate (un millar más que en el 2018), lechuga, cebolla o maíz, que se mantienen estables en los últimos ejercicios

Por lo que respecta a la distribución de tierras en los principales grupos de cultivos, se mantienen o crecen ligeramente la mayoría. Es el caso de los cereales en grano, que ocupan ahora 14.554 hectáreas, una cifra similar a la de los últimos años, un caso parecido a las 241 hectáreas de leguminosas, las 2.969 de huerta y fruta o las 8.217 de viñedo. Ganan superficie las plantaciones de castaño (ahora con 13.756 hectáreas), de cereal de grano (14.554), cultivos forrajeros (4.508) o las 6.442 de patata.

Producciones ganaderas

Si se toman los datos del Ministerio de Agricultura sobre los efectivos de ganado en las explotaciones ourensanas, marcan en ocho años el mejor registro los 428.236 efectivos de ganado porcino, muy por encima de los 334.946 del año 2018. También se marcan cifras récord en ganado bovino, con 68.251 cabezas de ganado, por encima de las 67.000 del año anterior. Marca el mejor registro la carne comercializada (157.563 toneladas), con registros inéditos en carne de ave y de bovino.

Modernización

La incorporación de maquinaria es uno de los elementos sustantivos de la modernización. El censo de tractores alcanza las 23.145 unidades, cifra inédita en cinco años, lo mismo que los 9.264 motocultores o las 195 cosechadoras.

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