Después del accidente, en el que no hubo heridos, el conductor se puso violento y se resistió a los agentes de la Policía Local
Un hombre empotró ayer por la tarde el coche que conducía contra las mesas de la terraza del bar Hermida, en el barrio ourensano de A Ponte. No hubo heridos, aunque una persona que estaba sentada en una mesa de la terraza terminó sobre el capó del automóvil. Nadie necesitó asistencias médicas.
Según testigos presenciales, el conductor, que por causas que se desconocen perdió el control del coche, mostraba una conducta extremdamente errática. En este escenario, fue requerida la presencia de la Policía Local. Al llegar al lugar de los hechos, el hombre recrudeció su actitud, llegándose a poner violento.
Cuando los agentes le pidieron calma, reaccionó mordiendo a un policía en una mano. Ante esto, fue detenido y trasladado a dependencias policiales, para serle efectuado un control de alcoholemia y drogas. Recuperándose del tremendo susto, testigos de los hechos señalaban que el conductor detenido podría ser un agente policial.