Los candidatos de PSOE, PP y DO se ven con posibilidades de gobernar sin descartar fórmulas
Pocas dudas ha podido despejar la primera semana de contactos serios entre los representantes de los partidos políticos con capacidad de forjar una mayoría suficiente para ser investidos como el próximo alcalde de Ourense, que sí coinciden en que las conversaciones se intensificarán a partir del lunes de nuevo y que el desenlace es imprevisible. "Hasta el último segundo o un acuerdo sobre la bocina", fueron algunas de las valoraciones vertidas.
Especialmente intenso fue este viernes para el candidato del PSOE, Rafael Rodríguez Villarino, que se vio las caras primero con el líder de DO, Gonzalo Pérez Jácome, y después con el alcalde en funciones y aspirante del PP, Jesús Vázquez, dos encuentros con un contenido muy diferente, como el socialista reconoce.
"Las sensaciones son muy diferentes, ya que lógicamente contemplamos unos escenarios distintos al PP", apuntó Villarino, que insiste en verse como el próximo alcalde de la ciudad, "bien en solitario o con un acuerdo con DO". Reconoce el líder del PSOE que "hay coincidencias programáticas en el cruce de planteamientos que nos hicimos, pero el martes seguiremos y seguro que hay alguna reunión más. Hay muchos escenarios".
En términos muy parecidos se expresó DO, que pone el foco también en la reunión que mantendrá con el PSOE la próxima semana. "Hemos dejado claro las posturas y nos emplazamos para el martes para definir las opciones definitivas para alcanzar un acuerdo que garantice investidura y estabilidad", señaló la formación en un comunicado.
Por su parte, el candidato del PP, Jesús Vázquez, recordó que mantiene "intactas las aspiracións de gobernar", aludiendo a que "case houbo un triple empate" en las eleccións, "con diferencias reducidas, polo que todos aspiramos a levar a cabo o proxecto, estamos lexitimados". El regidor en funciones destacó el ambiente "cordial" con Villarino, "e o diálogo seguirá, porque non sei se eu serei alcalde, o será Rafa ou outro".
Ambos candidatos coincidieron en que hay posibilidades de llegar a acuerdos en temas puntuales de importancia para la ciudad.
En relación a la propuesta de Feijóo de que se deje gobernar a las listas más votadas en Diputación y Concello, Vázquez recordó "ser partidario" de que gobierne "o que gañe, pero para todos, polo que non se pode esixir apoiar iso se non se cumpre".
Sobre esto, Villarino habla de "una propuesta a nivel Santiago pero hablando del qué y no del cómo". El socialista insistió en que el cambio en la Diputación "es urgente".
Ciudadanos y BNG, actores secundarios con objetivos muy diferentes
El reparto de escaños en el Concello de Ourense deparó una Corporación a cinco bandas, con tres actores protagonistas y con capacidad para ser decisivos para mayorías (PSOE, PP y DO) y dos con un papel a priori secundario, al contar con tan solo dos ediles que no son decisivos para la investidura (Ciudadanos y BNG).
Los objetivos de estos, como han demostrado en la ronda de contactos con el PSOE, son muy diferentes. El primero en dejar clara su postura fue el BNG, que estará en la oposición al ser inviable una suma para un gobierno de izquierdas. Garantiza, no obstante, total capacidad de diálogo sin líneas rojas para desbloquear los temas fundamentales para Ourense.
Mientras, Ciudadanos, con José Araújo y Laureano Bermejo, desea contar con responsabilidades de gobierno en una coalición y así se lo hizo saber al PSOE, que no descarta ningún escenario, consciente de que los "naranjas" son claves para el futuro en la Diputación.
