Ni descanso ni conciliación para abogados y procuradores

Los despachos de abogados y procuradores en Ourense, que tradicionalmente echan el cierre en agosto para coger vacaciones permanecerán abiertos este verano contra su voluntad. El pasado 28 de abril, agosto fue declarado como hábil, a través de un real decreto-ley aprobado por el Gobierno para evitar colapsos en los tribunales ante la situación de crisis sanitaria, en el que se incluyen la celebración de vistas y el transcurso de plazos procesales del 11 al 31. Tras su convalidación por el Congreso, sigue en vigor. Esta medida ha sentado muy mal entre los profesionales de la adjudicatura de Ourense, tanto abogados como procuradores, que consideran una “tomadura de pelo” la norma. A pesar de que el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, defendió que esta medida fue propuesta por varios consejeros autonómicos y consensuada con el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), la Fiscalía General del Estado (FGE) y las 12 comunidades autónomas con competencias transferidas, los abogados y procuradores han mostrado desde el principio su rechazo, alegando que se les priva de su derecho al descanso y la conciliación les obliga a estar pendientes no sólo de juicios, sino de notificaciones y recursos que suponen un agotamiento mental y una carga de estrés innecesaria. Ante esta polémica, el CGPJ instó en mayo a jueces y magistrados a calendarizar sus vacaciones y limitar las vistas en este mes, y comunicar los señalamientos antes de mediados de junio. Así, el pasado 21 de julio, la Comisión de Justicia aprobó por mayoría una nueva redacción, que no incluye la habilitación de agosto, pero la agenda parlamentaria hizo imposible su tramitación en el Senado, por lo que finalmente sigue siendo hábil, lo que no ha hecho más que empeorar la situación, condenando a los profesionales a trabajar gran parte del mes con escasa eficacia, ya que jueces, fiscales y demás personal jurídico continúan de vacaciones. “Colmo del absurdo" Desde el Colexio da Avogacía de Ourense, la decana Pilar López-Guerrero analiza la situación, y declara que con esta medida “no hemos ganado nada, salvo quedarnos sin vacaciones”. “Es absurdo que lleguen notificaciones cuyo plazo termina esta semana y la siguiente, y después se quedan paralizadas hasta septiembre porque el funcionario que tramita el tema no está, y no puede transferirse a otro que sí se encuentre trabajando”, reflexiona la decana, y añade que “lo que ya roza el colmo de lo absurdo” es aprobar a posteriori la vuelta de la inhabilidad del mes, dado que el Senado está en periodo vacacional. “Es una medida pensada con los pies, sin valorar la realidad de los juzgados del Estado español. He visto comunicados de colegios de otras comunidades y los apoyo completamente. Todo el mundo está indignado”, asegura López-Guerrero. También desde el Colexio Provincial de Procuradores lamentan la aplicación de esta medida. Ricardo Garrido, su decano, señala que “no va a solucionar prácticamente nada, la eficacia es nula”, porque en los 20 días hábiles de agosto, “se adelanta el trabajo en los despachos, pero no se agiliza la tramitación procesal, ya que los juicios siguen estancados”. “El único mes que tenemos para conciliación y descanso se ha visto limitado a 11 días”, recuerda el decano, que valora que la medida “tendría sentido” si hubiera sido tomada "con carácter general”, englobando tanto a abogados, procuradores, como jueces, fiscales, funcionarios y demás personal jurídico. Del lado de jueces y magistrados, su decano, Leonardo Álvarez, considera la medida "innecesaria", y ha causado más inconvenientes que ventajas desde su implantación: "No se adelanta mucho trabajo, porque en principio los jueces se supone que están de vacaciones, y, por contra, tienes a abogados y procuradores pendientes de las notificaciones y señalamientos en un mes bastante pausado, privándolos de gran parte de su periodo de descanso. En proporción al daño causado por lo que avanzas, no compensa". Jueces bajo mínimos Este agosto apenas hay jueces trabajando. Según asegura el decano del partido judicial de Ourense, tan sólo 7 de los 19 jueces del edificio judicial de O Couto están en activo durante este mes, repartidos entre los diferentes juzgados para cubrir los servicios mínimos. Lexnet, el sistema de notificaciones que no convence LexNET, la plataforma de gestión de notificaciones telemáticas de los juzgados a los profesionales de la justicia, está generando problemas a los letrados de Ourense. Las continuas caídas y los fallos que experimenta el sistema demasiado a menudo, y más durante este mes, en el cual ya se ha registrado algún que otro incidente, están en el punto de mira. Sin ir más lejos, el pasado jueves la red dependiente de la Administración de Xustiza de la Xunta de Galicia, dejó sin cobertura a sus clientes durante buena parte del día, al detectarse anomalías que no han permitido su correcto funcionamiento. "Es un programa para agilizar procesos, pero comparado con otras plataformas, está muy mal optimizado. Es lento, impreciso y no guarda los datos introducidos en caso de que el sistema falle, lo cual es más habitual de lo que parece. No está dotado de los medios necesarios para ofrecer la calidad que se supone en este servicio", asegura una letrada ourensana con despacho en la ciudad.