Las cumbres del oriente provincial siguen blancas. La lluvia caída de forma intermitente durante la jornada de ayer se transformó en nieve cuajada en las zonas altas, a 1.000 metros de altitud, obligando a extremar las precauciones a los conductores, pero ya sin aldeas aisladas en el Macizo Central. El paso de las máquinas quitanieves durante todo el sábado libró las calzadas, impidiendo que volviesen a quedar aldeas incomunicadas.
El ambiente gélido siguió caracterizando una jornada en la que los equipos de Meteogalicia registraron -4,87 y -5,24 grados en Lardeira (Carballeda de Valdeorras) y Xares (A Veiga), respectivamente. Estas temperaturas, reforzadas con alguna que otra nevada de no excesiva intensidad, permitieron que zonas como el Alto da Portela, a 1.125 metros de altitud, en la carretera OU-121 y entre los concellos de O Barco y A Veiga, fuese el lugar de encuentro de un buen número de familias deseosas de divertirse con la nieve. También recibió visitantes la estación de montaña de Manzaneda. Fueron muchas las familias que aprovecharon la jornada dominical para acercarse hasta el complejo de invierno gallego, lo que confirmó la larga fila de vehículos estacionados, que alcanzó aproximadamente kilómetro y medio de longitud. El cierre de los servicios de la estación no fue impedimento para que amantes de la nieve de distintos puntos de Galicia se animasen a jugar con ella.
El temporal causó estragos en varios accesos de A Peroxa, Coles y Vilamarín
Las previsiones para los próximos días muestran una progresiva vuelta a la normalidad de temperaturas, con mínimos que se mantendrán sin cambios destacados, aunque oscilarán según avance la semana, y las máximas ascenderán moderadamente. Las precipitaciones serán la tónica general prácticamente todos los días.
Debido al temporal, los efectivos del parque de bomberos de Carballiño y O Ribeiro se desplazaron repetidas veces ayer hasta los concellos de A Peroxa, Vilamarín y Coles para retirar árboles, postes y cableado que había invadido el entorno vial.
Concretamente, en A Peroxa se movilizó una dotación para retirar los árboles caídos que obstaculizaban una carretera comarcal. Salieron a las 09,30 horas y procedieron a despejar el acceso entre As Cerdeiras y la localidad, en donde varios árboles en un tramo aproximado de un kilómetro estaban obstruyendo en parte o completamente la calzada.
