La Asociación de Vecinos, la Diputación y el Concello se reunieron varias veces para buscar soluciones
La falta de marquesina en una de las paradas de autobús en Beiro -motivo de quejas entre los vecinos- se solventará en menos de dos meses, según adelanta el concejal de Mobilidade del Concello de Ourense, Miguel Pardo.
La parada se cambió de lugar debido a un informe de la Policía Local sobre la peligrosidad de la antigua, situada en un cruce entre carreteras. "El traslado del punto de recogida se realizó de forma inmediata a unos metros de allí por cuestiones de seguridad", explica Pardo. El cambio provocó que, desde entonces, los vecinos esperen el autobús en un terreno no asfaltado, al lado de la carretera. "Desde que empecé en este puesto -el pasado febrero- he estado en continua comunicación con la asociación vecinal y con la Diputación, buscando una solución", asegura el concejal. El espacio en el que se colocará la nueva marquesina ocupa una finca, pero también necesita de un arcén que se extienda desde la carretera, de titularidad provincial. "Después de diversas reuniones se decidió que los vecinos adquiriesen ese terreno -antes privado-, la Diputación se ocupará de construir el arcén y nosotros colocaremos la marquesina". Para llevarlo a cabo, las administraciones firmarán un convenio de colaboración en las próximas semanas.
La nueva instalación, además, deberá estar adaptada para que todo tipo de usuarios puedan acceder a ella: "El pavimento tiene que ser de un material concreto, con una serie de ranuras específicas para personas invidentes, y con una rampa lateral que permita el acceso a personas con movilidad reducida". La marquesina es similar a la colocada en Untes por el Concello de Ourense recientemente.
