La Policía Local de Ourense acaba de incorporar a ocho nuevos agentes. El acto de la toma de posesión se desarrolló en el salón de plenos del Concello este lunes.
La falta de efectivos es uno de los problemas que lleva tiempo acarreando el cuerpo. Antes de estas incorporaciones, la plantilla estaba compuesta por 86 agentes, 11 menos que en el año 2020 y lejos de llegar a los 130 necesarios para cubrir el perímetro ourensano.
A principios de diciembre, la Policía Local incorporó además diez nuevos vehículos a su parque móvil, una asignatura que el Concello tenía pendiente desde mucho tiempo atrás. Hasta agosto -cuando se introdujeron seis patrullas-, los agentes recurrían a menudo a otras fuerzas de seguridad para, por ejemplo, llevar a detenidos. Ahora, el cuerpo está dotado con cinco patrulleros, cuatro furgones de atestados y un vehículo sin rotular. A estos se suman seis coches ya estrenados en verano. Todos nuevos, algo que no ocurría desde hacía 20 años.