El presidente gallego ha señalado que "el AVE tiene que estar hecho en 2018. No hay que repensar su llegada"
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha garantizado que no se "callará" a la hora de demandar el traspaso de la AP-9, que considera "irrenunciable", ni tampoco rebajará las exigencias para la llegada del AVE a Galicia, que "tiene que estar hecho en 2018", con independencia de que se aborden "respuestas concretas" para los "problemas concretos" en algunos tramos.
"No me voy a callar porque voy a defender el planteamiento de mi país. A estas alturas no hay que repensar el AVE, hay que hacerlo. El AVE tiene que estar hecho en 2018 y los problemas concretos de los tramos concretos tienen que tener una respuesta concreta. No voy a pasar por menos. En el mes de enero nos tienen que decir cuáles son los problemas concretos y cómo se resuelven", ha sentenciado en la sesión de control de la Cámara.
Así se ha pronunciado después de que el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, dejase en el aire la fecha comprometida tras aludir a "dificultades" en determinados tramos, entre ellos la variante de Ourense. Lo ha hecho en respuesta a la portavoz parlamentaria del BNG, Ana Pontón, quien censuró el "ultraje" del Gobierno central en cuestiones como el AVE y el traspaso de la AP-9.
Al respecto del veto al debate de la iniciativa unánime que partió de Galicia para pedir dicha transferencia, Pontón ha avanzado que el BNG llevará a la Cámara el planteamiento de un recurso ante el Tribunal Constitucional (TC) y que, si no hay una modificación de la postura, planteará también la recusación de la presidenta del Congreso, Ana Pastor.
Además, ha acusado a Feijóo de no tener "palabra" ni peso dentro de su partido, mientras que el presidente de la Xunta ha preguntado si la oposición va a "bloquear" la aprobación de los presupuestos en el Estado para 2017, dando a entender que un "bloqueo" de este tipo podría suponer más retrasos en los plazos de la alta velocidad
