Una charla con Leonardo Lemos Montanet en su despacho del Obispado de Ourense, mientras los catalanes votaban en el 21-D
Es el mayor de cinco hermanos en una familia de militares de Marina, una salida de futuro que Lemos Montanet vio clara ya de crío. Al que es obispo de Ourense desde 2011 se le cruzó Dios en el camino cuando estaba acabando COU. "Y me fui al seminario", dice. Coincide en que Ourense es la diócesis más futbolera-"de toda Galicia, fuera no juegan tanto los curas"-, pero él huye del balompié y prefiere la filatelia. "Aunque no tengo tiempo". Desde su despacho del Obispado, mientras los catalanes votan en el 21-D, reflexiona.
¿Qué le parece que la Iglesia haya tomado posición en el procés?
La Iglesia lanzó una nota equilibrada, justa y buscando la cordialidad y el diálogo entre las partes. Lo mismo ha sucedido con los obispos catalanes, después hubo casos particulares de algunas comunidades cristianas que se prestaron a todo aquel asunto del 1 de octubre. Pero la Iglesia ha tenido máximo respeto con el procés y cree que no debe intervenir.
En la exposición de los suevos pidió un ejercicio de memoria para no reconstruir la historia.
Hice referencia a lo que evidentemente es justo. Galicia es un reino históricamente comprobado. Nunca hemos manipulado la historia, yo creo que en algunos lugares-y no estoy pensando en Cataluña-, sí que se hace una especie de manipulación. Es necesario estudiar la historia, porque la Iglesia católica está presente desde el surgimiento de nuestra identidad nacional. Reconozco que los obispos y sacerdotes catalanes tienen que dar una respuesta a su pueblo, y creo que la correcta es de unidad, tolerancia y perdón.
Hablemos de la Iglesia aquí, ¿cómo afronta la crisis vocacional?
Tenemos que reconocer que la de los seminarios es fuerte, pero todos los años ordenamos a dos o tres sacerdotes. Para ser una diócesis de provincia y rural, estamos discretamente bien. Lo que me preocupa mucho es que no encontramos vocaciones para la vida consagrada femenina.
¿A qué cree que se debe?
Tenemos una sociedad compleja donde los valores religiosos no están de moda, los niños y los jóvenes a veces reciben en el colegio mensajes sesgados sobre la Iglesia. Está muy mal considerada, los medios destacan lo negativo. La vida sosegada, tranquila y heroica de los curas yendo a aldeas pequeñas para atender a 12 viejecitas no es noticia y acontece todos los fines de semana. El punto de referencia que tiene una anciana que se ha quedado sola es el curiña.
¿Sigue intacta esa figura “omnipresente” del cura en el rural, como lo era el médico y el maestro?
En el rural solo ha quedado la referencia del cura. Estoy haciendo la visita pastoral en el rural y estuve en comunidades pequeñas con iglesias preciosas. ¿Quién está allí? El sacerdote, y eso no es noticia. Y, sin embargo, por poner un ejemplo, ha fallecido un cardenal hace unos días y a través de algunos medios dicen que ha muerto "el cardenal que amparó a los pederastas". La noticia no fue la muerte del cardenal, sino que fue un encubridor de esos abusos, si es que fue. Se presenta una sola cara de la Iglesia. Cuando se toca el tema religioso, la gente tiene pudor. En el grupo de amigos se puede hablar de cualquier cosa, pero cuando se toca la religión...
¿Piensa que es un tema tabú?
Implica pudor y si se habla se utilizan tópicos.
Dice que es más noticiable lo negativo, los abusos. ¿Cómo cree que debe actuar la Iglesia? El papa Francisco ha tomado varias medidas....
Benedicto XVI comenzó primero de una manera radical , él acuñó "tolerancia cero" y ese fue el lenguaje que nos hizo llegar a los obispos, de manera que ninguno de nosotros estamos dispuestos a encubrir ningún delito de este tipo. La única institución que ha tomado serias medidas contra la pederastia ha sido la Iglesia católica. Me gustaría que otras instituciones hubieran hecho lo mismo. En un colectivo tan grande es normal que haya ovejas negras, pero no es justificable. Si en una persona son intolerables los abusos, en un sacerdote es innombrable.
¿Es un tema que le preocupa?
A la Iglesia se le coloca un baremo muy alto en la sociedad, y creo que es bueno. Con otras instituciones se pone más bajo el nivel. Y tenemos que andar con cuidado, creo que este tema a veces lo hemos magnificado. Hace unos días una chica ha acusado a otros chicos de abusar de ella en A Estrada, y al final se desdice. Eso no puede ser, hay que ser honesto.
En ese caso podríamos aplicar también lo de la oveja negra...
No es infrecuente. Lo sé a través de compañeros míos obispos que han recibido extorsión.
¿Se ha visto en alguna situación así?
No, gracias a Dios a mí no me ha hecho nadie extorsión en ese tema. Y van de lado, porque dinero tengo poco. La casa es grande y está muy arreglada, pero está llena de pufos económicos.
¿Cómo llega a fin de mes el Obispado?
Muy mal, con mucha dificultad. Anteayer me llamó un sacerdote preocupado porque cayó una tabla del techo en su iglesia. Cuando es problema de estructura de una iglesia no pienso en 40.000 euros, sino en 200.000 o así. ¡A ver de dónde los sacamos!
¿Hace muchos números?
Sí. El seminario hay que mantenerlo, hay parroquias en el rural a las que ya estamos ayudando a pagar la luz de la iglesia.
¿Y los bienes a la venta?
Nuestra provincia no está en momentos buenos. Nuestra diócesis puede funcionar gracias a a la cooperación de otras iglesias españolas. Cuando hacen la declaración de la renta los católicos de fuera ponen la equis de ayuda a la Iglesia.
En Ourense se redujo recientemente lo de marcar la equis...
Este año ha subido un poco, es que la mayoría son ancianos y su nómina es una pensión de jubilación que no entra en el baremo del IRPF.
Y a los jóvenes, ¿están llegando?
En Cáritas me llevé una sorpresa. La situación es a la inversa de nuestras iglesias los domingos. Los voluntarios de Cáritas son jóvenes.
Usan las nuevas tecnologías, ¿es buena idea? El concurso de belenes por Wasap tiene éxito.
Sí, y la web del Obispado es muy buena y no se conoce. También tenemos grupos de wasap para curas.
Usted estará en todos.
Hoy tengo ocho o nueve mensajes. Ahora tenemos un proyecto muy bonito que es el Sínodo Diocesano, en Ourense no se hacía desde 1908.
