El Obispado inició una campaña para reavivar la adoración en la celebración de la Eucaristía. La iniciativa conllevó la colocación de grandes carteles en la entrada de todos los templos, en los que se le recuerda a los fieles que deben entrar en la iglesia vestidos de forma adecuada y mantengan la compostura corporal. También les pide que sean puntuales a todos los actos religiosos, que apaguen los teléfonos móviles y que busquen dentro de la iglesia el lugar que más les motive a rezar.
Sólo pretendemos promover el silencio y la oración dentro de las iglesias. Este es uno de los principales objetivos, según el secretario de la Vicaría de Pastoral, Félix Álvarez Rodríguez, de la campaña que acaba de poner en marcha el Obispado de Ourense para reavivar la adoración en las celebraciones de la Eucaristía y demás actos de culto. El cartel de la iniciativa se puede apreciar en la entrada de la iglesias y la Vicaría de Pastoral recuerda a los fieles que vistan adecuadamente para entrar en un templo, que no lo hagan con ropas que llamen la atención. En una iglesia se entra vestido con repeto, no de forma despampanante. Se puede entrar con la ropa de trabajar, con una ropa limpia, decorosa, pero no hay porque llevar todas las joyas de la familia, aseguró Félix Álvarez.
En el cartel también se solicita a los fieles que no caminen por el templo llamando la atención de los demás y, al entrar, comprobar si llevan el teléfono móvil encendido. En caso de ser así, deben apagarlo o ponerlo en silencio. Félix Álvarez aseguraba que la campaña no se inició porque detectarán que había muchos fieles a los que les sonase el teléfono móvil durante los actos religiosos, ni tampoco porque hubiera personas que acudían a misa vestidas con faldas cortas o camisas con mucho escote. La iniciativa está recogida dentro de la programación pastoral para el próximo año y tiene como objetivo promover el silencio dentro de los templos, sobre todo durante los actos religiosos, aseguró.
El Obispado también pide a los fieles que no salgan de la iglesia hasta que el sacerdote oficiante se retire a la sacristía y, al salir, lo hagan de forma ordenada y en silencio. Los fieles deben respetar la postura cor poral, tanto cuando están de pie, como arrodillados o sentados. También les prohíbe mantener conversaciones en voz alta y para saludar a un conocido en el interior de la iglesia deben hacerlo de forma discreta, sin distraer la atención de los demás.
Mantener las iglesias abiertas e informar de horarios
Las sacerdotes son los que deben velar porque se cumpla todo lo acordado por la Vicaría de Pastoral en las iglesias de las distintas parroquias de la provincia. Además, la campaña para reavivar la adoración en los actos religiosos invita a los párrocos a potenciar la procesión del Corpus y la oración en el día de Jueves Santo.
El Obispado también reclama de los sacerdotes un esfuerzo para mantener las iglesias abiertas el máximo de horas posibles, promover la adoración e informar a los vecinos del horarios de apertura. Otras de las exigencias recogidas en la iniciativa se refieren a tener especial cuidado con la iluminación, manteniéndo una luz encendida constantemente en el Sagrario, limpias y en perfecto estado de funcionamiento todas las lámparas y candelabros, sobre todo durante los actos religiosos.
Escuela de silencio
Los religiosos deberán cuidar el mutismo durante todas las celebraciones litúrgicas, llegando incluso a crear hábitos que promuevan la discreción, poniendo en marcha escuelas de silencio, talleres de oración y grupos de adoración nocturna y diurna. Los sacerdotes también deben promover la creación de Cáritas en sus parroquias para atender a las personas que carecen de recursos económicos.
En el cartel también se solicita a los fieles que no caminen por el templo llamando la atención de los demás y, al entrar, comprobar si llevan el teléfono móvil encendido. En caso de ser así, deben apagarlo o ponerlo en silencio. Félix Álvarez aseguraba que la campaña no se inició porque detectarán que había muchos fieles a los que les sonase el teléfono móvil durante los actos religiosos, ni tampoco porque hubiera personas que acudían a misa vestidas con faldas cortas o camisas con mucho escote. La iniciativa está recogida dentro de la programación pastoral para el próximo año y tiene como objetivo promover el silencio dentro de los templos, sobre todo durante los actos religiosos, aseguró.
El Obispado también pide a los fieles que no salgan de la iglesia hasta que el sacerdote oficiante se retire a la sacristía y, al salir, lo hagan de forma ordenada y en silencio. Los fieles deben respetar la postura cor poral, tanto cuando están de pie, como arrodillados o sentados. También les prohíbe mantener conversaciones en voz alta y para saludar a un conocido en el interior de la iglesia deben hacerlo de forma discreta, sin distraer la atención de los demás.
Mantener las iglesias abiertas e informar de horarios
Las sacerdotes son los que deben velar porque se cumpla todo lo acordado por la Vicaría de Pastoral en las iglesias de las distintas parroquias de la provincia. Además, la campaña para reavivar la adoración en los actos religiosos invita a los párrocos a potenciar la procesión del Corpus y la oración en el día de Jueves Santo.
El Obispado también reclama de los sacerdotes un esfuerzo para mantener las iglesias abiertas el máximo de horas posibles, promover la adoración e informar a los vecinos del horarios de apertura. Otras de las exigencias recogidas en la iniciativa se refieren a tener especial cuidado con la iluminación, manteniéndo una luz encendida constantemente en el Sagrario, limpias y en perfecto estado de funcionamiento todas las lámparas y candelabros, sobre todo durante los actos religiosos.
Escuela de silencio
Los religiosos deberán cuidar el mutismo durante todas las celebraciones litúrgicas, llegando incluso a crear hábitos que promuevan la discreción, poniendo en marcha escuelas de silencio, talleres de oración y grupos de adoración nocturna y diurna. Los sacerdotes también deben promover la creación de Cáritas en sus parroquias para atender a las personas que carecen de recursos económicos.
