Ante la crisis demográfica que ha llevado pareja, de forma irremediable, la progresiva desprotección de las iglesias del rural, el Obispado se ha visto en la obligación de concentrar en la ciudad joyas patrimoniales de toda la provincia. Custodiadas en un archivo, ahora el proyecto del obispo de Ourense, Leonardo Lemos, es ir un paso más allá: "No queríamos que fuese solo un almacén, sino un lugar expositivo". Para ello perfilan el proyecto para crear un museo de arte sacro en el propio Obispado, dentro de la antigua capilla del Seminario Menor. "Tenemos un espacio grande detrás del Obispado, los expertos de la Xunta lo han estudiado y su valoración es que las condiciones son oportunas. Se está redactando el proyecto", apunta Lemos.
Con este museo pretenden acercar a ourensanos y turistas valiosas joyas de las parroquias de la diócesis. En este nuevo activo para la ciudad se encontrarían piezas de patrimonio histórico pictórico y de orfebrería, documentos litúrgicos y joyas arquitectónicas datadas, por ejemplo, en el románico. "Me duele que estas verdaderas bellezas estén ocultas", aprecia Lemos. Dentro del Obispado ofrecen exposiciones temporales y, con este museo, buscan ahora "algo más permanente". También sería una oportunidad, apunta Lemos, para que patronatos y coleccionistas privados cedan piezas.
Con el visto bueno de la Xunta, el proyecto avanza, aunque a menor ritmo del que le gustaría a Lemos. Queda por superar la barrera económica. "La diócesis no puede financiar todo esto, por lo que tendremos que buscar mecenas o entidades que promocionen el arte sacro en Ourense", señala el obispo, que tiende la mano a administraciones públicas y empresas.
Las piezas se situarían en una capilla con tres niveles. "Es un gran espacio que puede crear un ambiente museístico y expositivo interesante", comenta Lemos. Su altura es uno de sus puntos a favor: "La idea es aprovechar todo el alzado de la iglesia, en un plan similar al que se siguió con la iglesia de San Martín Pinario en la exposición 'Galicia no tempo". El proyecto continúa dando pasos. "Me gustaría que saliese adelante. Hay que proteger este patrimonio", señala Lemos.
Un activo turístico y la protección del patrimonio ante la realidad del rural
Los robos en las iglesias parroquiales del rural son, desgraciadamente, una constante. Durante los últimos dos siglos se han registrado al menos 300 robos de obras de arte en estos templos. Muchos no han sido recuperados. El obispo, Leonardo Lemos, destaca por su simbolismo el robo de la Virxe do Cristal, acontecido hace ahora cinco años en Vilanova dos Infantes y que le costó la vida al párroco Adolfo Enríquez en un crimen todavía sin resolver. "Se han llevado piezas muy valiosas como esta, que guardan un elemento devocional excepcional. Un trabajo de orfebrería de entre el siglo XVII y XVIII que se ha perdido".
En el Obispado cuentan con un inventario en el que registran las piezas. "Es un documento que se entrega a las autoridades en caso de que desaparezca alguna pieza", señala Lemos, que destaca la labor de las autoridades a la vez que resalta que la mejor manera de frenar la sangría de robos fue la concentración del patrimonio, que ahora perfila el proyecto para musealizarse.
