Lucha contra el coronavirus

Tres olas, tres hospitales: “Era medicina de guerra"

photo_camera El médico Fernando Eiras, residente de cuarto año en el CHUO.
Fernando Eiras luchó contra el covid en las UCIs de Madrid, Ourense y Vigo

En la batalla contra el covid, Fernando Eiras ha combatido en varios frentes. Nacido en Vigo, este joven médico es hoy residente de cuarto año en el servicio de Medicina Intensiva del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), y ha vivido cada una de las olas del covid en un hospital diferente. La primera le pilló en el 12 de Octubre, en Madrid; la segunda, en el CHUO ourensano, y hoy se enfrenta a la tercera desde el Álvaro Cunqueiro, en Vigo.

"El virus nos pilló por sorpresa; lo veíamos ahí en China, lejos, y de repente teníamos el primer paciente y ya fue intubar e intubar", recuerda Eiras, que llegó a Madrid en enero para hacer una rotación externa, un periodo que los médicos residentes pasan en otro centro para aprender acerca de áreas que no se cubren en el suyo. 

En lugar de aprender a curar politraumatismos, su objetivo inicial, Eiras se encontró con un torbellino de confusión, caos y precariedad. "No teníamos respiradores, nos quedamos sin camas en la UCI, teníamos que ingresar pacientes en los quirófanos... cuando el Ministerio dijo que los residentes regresáramos a nuestros hospitales, me pidieron que me quedara, y estuve allí hasta mayo", comenta.

Lejos de casa y viviendo solo, en aquellos momentos se volcó en el trabajo. El gallego describe aquella situación como "medicina de guerra", y reconoce que todavía acusa el cansancio acumulado. Con los meses, la ola pasó, y -coincidiendo con la orden de desconfinar a la población-, Eiras regresó a Ourense.

Segunda y tercera ola

"La segunda ola ya fue diferente, la viví con mi gente, en el hospital que me ha enseñado todo lo que sé", apunta el residente, que ahora se encuentra en Vigo, llevando a cabo su última rotación externa y combatiendo el covid mientras avanza la vacunación. 

Este paso por varios centros le ha dejado clara una cosa: "Nunca se había unificado tanto el manejo de los pacientes en la UCI como en esta pandemia", apunta. Eiras está realizando, además, su tesis doctoral sobre la aplicación de Big Data en desarrollo de fármacos, y destaca lo rápido que se ha llegado a la vacuna. "Jamás habría imaginado que un tratamiento así se podría conseguir en menos de un año", insiste.

Mirando adelante

"Ahora estoy bastante cansado, porque empecé el año muy fuerte", confiesa el vigués. Apunta que una de las aptitudes que le ayudaron vino de su labor como voluntario en varias entidades: "Esta tarea me hizo aprender capacidad de adaptación, a otros ambientes y otros equipos", destaca, y apunta el buen ambiente con sus compañeros tanto en Madrid como en Vigo u Ourense. Mirando al futuro, desea -como tantos otros- que termine ya todo esto. En su caso, será el final de una larga batalla por tres hospitales.

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