La crisis del coronavirus, con una increíble escalada de casos a nivel mundial, ha pillado a tres ourensanos (en un grupo de cinco amigos) disfrutando de sus vacaciones en Estados Unidos que se están viendo en una auténtica odisea para regresar a casa. Con el vuelo de vuelta previsto para el próximo sábado desde San Francisco, la gravedad de la situación y la incógnita de si el Gobierno americano cerrará su espacio aéreo les llevó a buscar la forma de volver a Ourense. Dos aeropuertos y ocho horas de viaje después por dos estados llegaron a Los Ángeles para intentar conseguir billetes tras pedir por todos los medios la colaboración de agencia de viajes, compañía aérea y consulado español
"Cada uno nos dice una cosa y no se hace cargo. La agencia no contesta y tampoco podíamos comprar porque no era seguro que llegásemos, por lo que esperábamos a que nos metieran en algún vuelo", explica una de las afectadas, contando que la embajada les animaba a regresar, pero sin ayuda. "Nos decían que nos fuéramos. ¿Pero cómo? No había manera", explica.
Finalmente, la persistencia parece haber dado sus frutos y tienen ya en su agenda llegar esta noche a Madrid tras una escala en Londres. "A ver si no se cancela", confiesa la joven ourensana, pensando ya en las dificultades que le esperarían a su llegada a España, complicaciones que a tenor de lo vivido estos días en Estados Unidos serían mucho más fáciles de solventar.
