Durante el primer semestre de este año, sólo un 22% de matrimonios se formalización en la iglesia
Los ourensanos cada vez se casan menos, y cuando lo hacen optan ya mayoritariamente por enlaces exclusivamente civiles. Esa al menos es la conclusión que se extrae teniendo en cuenta los últimos datos hechos públicos por el Instituto Nacional de Estadística. En el primer semestre de este año que está a punto de despedirse se produjeron un total de 334 enlaces en la provincia de Ourense, de los cuales 253 fueron civiles y tan sólo 74 tuvieron lugar por el rito católico (concretamente, hubo una boda oficiada de otra religión y seis matrimonios de los que no consta la forma del enlace).
Estos números suponen que sólo un 22 por ciento de los contrayentes en esos primeros seis meses eligieron el matrimonio religioso, cifra que hace unas décadas sería totalmente impensable, ya que los enlaces católicos eran mayoritarios.
Por meses, el de abril ha sido el más bajo para los enlaces católicos, sólo hubo uno frente a los 72 civiles, ni tan siquiera la llegada del verano cambió la tendencia en el primer semestre. De hecho, en junio, aunque las bodas por la iglesia aumentaron hasta una cifra de 36, el matrimonio civil continuó victorioso, con 73 enlaces.
El paso de los años evidencia las pocas ganas de los ourensanos por regularizar con papeles su estado sentimental o su vida en pareja. En el año 2010, se produjeron un total de 908 bodas, de las cuales el 47 por ciento fueron católicas (433); en el 2013, la cifra total se redujo hasta 861 enlaces, y sólo un 39 por ciento fueron por la iglesia, y en el 2014, se casaron 846 parejas, y el porcentaje de enlaces católicos continuó su línea descendente hasta un 36 por ciento del total.
Muchas de las parejas que optan por un enlace eclesiástico, prácticamente siempre católico, para contraer matrimonio lo hacen por cuestiones familiares. "A mí me daba igual casarme por la iglesia o no, es más,mi pareja prefería hacerlo sólo por lo civil, en el Concello, pero a mi madre le hacía especial ilusión la boda católica y, al final, cedimos, y organizamos la boda por la iglesia", asegura Gloria Gómez, de 38 años y casada hace dos.
Otras parejas lo tienen muy claro, y nada hizo que cambiaran su propósito de casarse exclusivamente por lo civil. Germán Álvarez se casó a los 40 y lo hizo, primero en el juzgado, y después con una gran fiesta en un restaurante en la que simuló la boda al estilo americano. "Lo pasamos muy bien, tuvimos la boda especial que queríamos, y sin la religión por medio. Eso lo teníamos muy claro y nuestras familias también".
