El fiscal sitúa al frente de la trama a los arousanos Juan Marcos Vigo Fernández, José Luis Viñas Morgade y Antonio Carballa Magadalena
La sección quinta de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo, ha acordado sobreseer la causa penal abierta por el alijo de drogas de 3.000 kilos de cocaína a bordo del buque "Rippide" contra los tres ourensanos a los que la Policía Nacional había implicado en la trama: Jorge Gómez Calviño, empresario muy conocido por ser el manager de las giras Manu Chao; el también empresario inmobiliario José Benito Álvarez-Testa y Manuel Rodríguez Conde "Manolo Rotondas", el único de los tres que tenía antecedentes por tráfico de sustancias estupefacientes.
El fiscal del caso ya había acordado al instructor el sobreseimiento del proceso contra los tres ourensanos cuando interesó la conclusión del sumario pero ahora la Audiencia lo confirma en un auto que es firme y no admite recurso. Por su parte, la sala acuerda la apertura de juicio oral contra 18 de los imputados, quienes serán acusados penalmente de un delito contra la salud pública agravado por la cantidad de droga incautada (tres toneladas), la utilización de embarcación y la supuesta pertenencia de los encausados a una organización criminal así como dos delitos de tenencia ilícita de arma corta. Asimismo, en el sumario figuran otras cuatro personas como responsables civiles subsidiarias.
El fiscal sitúa al frente de la trama a los arousanos Juan Marcos Vigo Fernández, José Luis Viñas Morgade y Antonio Carballa Magadalena. Mantiene que ellos eran los encargados de coordinar la llegada de la droga a bordo del buque nodriza senegalés, con capitán coreano y cuatro tripulantes indonesios. Este fue apresado a finales de mayo de 2013 cuando regresaba a las costas de Venezuela con el alijo al no haber podido descargarlo por la avería de un velero propiedad de José Manuel Rodríguez Camesella.
Precisamente la amistad de Gómez Calviño, basada en su afición a la navegación, con Rodríguez Camesella fue del hilo que tiró la Policía para implicarlo. El representante de Manu Chao había cruzado varias llamadas intrascendentes con él -se conocieron en un bar de Ourense- y habían coincido en Colombia por motivos profesionales. Pero "este vínculo intrascendente fue suficiente para que la Policía lo implicara causándole un perjuicio enorme al empresario musical", tal como valoró su letrado, Arturo González Estévez.
Por su parte,Álvarez Testa y Rodríguez Conde fueron inculpados inicialmente "ante las sospechas de que pudieran aportar dinero o fianza" para llevar a cabo el desembarco de la droga, tal como recoge el auto de la Audiencia. Añade que "los indicios fijados por el instructor en el auto de procesamiento con respecto a su intervención no son suficientes para decretar la apertura de juicio oral".
La sala precisa que no concurren requisitos suficientes para acusar a los tres ourensanos así como a María Pardal y José Ramiro "como autores, cómplices o encubridores".
