La ciudad de Ourense será una de las 150 localidades españolas que deberá tener su propia "zona de bajas emisiones" en el centro urbano. El Gobierno central ha anunciado que en un máximo de 100 días pondrá en marcha la maquinaria para aprobar el proyecto de Ley de Cambio Climático, consecuencia de la Declaración de Emergencia Climática realizada el pasado 21 de enero por el Consejo de Minsitros.
El proceso de peatonalización y restricción del tráfico rodado, que se incluirá en esa norma, todavía tiene mucho camino por recorrer en Ourense. Casi la mitad de los vehículos de la provincia no pueden acceder al distintivo ambiental y no podrían entrar a un futuro "Ourense Central" ni en la restricción más liviana.
Los planes del Gobierno chocan con las dificultades que los últimos gobiernos locales ourensanos han tenido para poner en marcha espacios más accesibles para las personas.
El Gobierno central, que ya había anunciado sus intenciones de limitar el acceso de coches en el centro de las ciudades de más de 50.000 habitantes en 2018, ahora vuelve a la carga, pero con la seguridad de sacarlo adelante.
La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha anunciado que la nueva ley será la misma que estaba preparada el pasado verano, pero con un cambio sustancial en cuanto a las zonas de bajas emisiones. Donde antes se "habilitaba" a los municipios a establecer estas zonas, ahora "propone la obligación".
La norma seguirá los pasos que se han aplicado en Madrid Central o que este mismo 2020 entrará en vigor también en Barcelona, por lo que a partir de "como tarde, 2025", solo podrán acceder al centro de Ourense vehículos con distintivo ambiental 0 Emisiones, vehículos con distintivo ambiental ECO o vehículos con distintivo ambiental C o B. Todo ello, en caso de que la norma elegida sea la más liviana, ya que en el caso de Madrid, por ejemplo, los vehículos C o B solo pueden acceder si estacionan en un parking público.
Un 45,5% del total
En el caso de Ourense, 53.812 coches diésel no pueden optar al distintivo ambiental (por estar matriculados antes de enero de 2006). En los turismos de gasolina, son 32.229 los que no pueden optar al distintivo mínimo (por ser de antes de enero del 2000). En total, 86.041 vehículos sobre los 188.923 matriculados en la provincia actualmente, es decir, un 45,5% del total.
El parque de los turismos se moderniza, pero a un ritmo aún lento
Poco a poco, se va reduciendo el peso de estos vehículos contaminantes en el parque de vehículos ourensano. Atendiendo a las estadísticas de la Dirección General de Tráfico, desde finales de 2018 a finales de 2019, los turismos que no podrían obtener distintivo ambiental para ir por el centro de las ciudades a partir de 2025 han bajado del 50,8% al 45,5% actual.
En noviembre de 2018 eran 93,380 los vehículos ourensanos sin posibilidad de tener distintivo ambiental, sobre un total de 183.175 turismos en la provincia. Ahora, son bastantes menos (86.041), dentro de un parque de vehículos mucho más amplio.
No gana precisamente peso, sube muy poco a poco, el coche eléctrico (solo hay 67), aunque sí se ha producido una progresiva modernización de los coches. n
