La cara más solidaria de Ourense se deja ver, una vez más, en el envío de ayuda humanitaria a los países más vulnerables. Mientras la provincia sigue acogiendo a refugiados ucranianos, un año después del inicio de la guerra -la Subdelegación cifra en 400 las personas acogidas-, las entidades se vuelcan también con Turquía y Siria. El terremoto que asoló ambos países el pasado 6 de febrero, dejó, según las cifras oficiales, 45.000 muertos, miles de heridos y desplazados e incontables destrozos en poblaciones. Toda ayuda es poca, y por ello el Rotary Club inició ayer una iniciativa de recogida de útiles y comida, en la que colaboran los concellos de la ciudad y del área metropolitana, asociaciones profesionales, entidades sociales y empresas.
La presidenta del Rotary, Elvira Carregado, resalta la importancia de “aportar nuestro granito de arena” en la recuperación tras la tragedia. “Dos de nuestros miembros nos plantearon enviar ayuda, y nos pareció una extraordinaria propuesta”, detalla. El local de la entidad en la ciudad (Calle Vasco da Ponte, en horario de 12,00 a 21,00 horas), el Centro Comercial Ponte Vella y la sede municipal de los concellos participantes serán los puntos de recogida hasta el próximo lunes. “Sobre todo se necesita ropa de abrigo, alimentos no perecederos, baterías, tiendas de campaña de invierno para varias personas y generadores, pero todo suma”, comenta.
Una vez se organicen las donaciones, se enviarán con la máxima brevedad posible. El traslado se realizará a través de la embajada de Turquía, que cuenta con una nave en el aeropuerto de Madrid para el acopio de ayuda humanitaria. “En el caso de Siria es un poco más difícil, pero ya hemos contactado con entidades y oenegés que trabajan allí”, explica Carregado.
Envío de ayuda
No es la primera vez que la provincia envía material humanitario. Tras el estallido de la guerra en Ucrania, hace hoy un año, la Diputación de Ourense habilitó un centro logístico en el polígono de San Cibrao para organizar la oleada de donaciones en municipios, empresas, entidades sociales y particulares. Entre marzo y junio del pasado año, de Ourense salieron dos camiones cargados de mantas, ropa, juguetes y alimentos para ayudar a la población ucraniana.
