El padrón de vehículos supera ya al de vecinos en 30 concellos

Apego al volante, despoblación, actividad económica o búsqueda de "paraísos" en los que pagar un Impuesto de Vehículos sobre Tracción Mecánica (IVTM) más bajo están dando como resultado un cóctel en la provincia en la que ya son 30 los concellos cuyo padrón de vehículos supera al de vecinos, según se desprende del cruce de datos de la Dirección General de Tráfico y de población publicados por el Instituto Galego de Estatística.

Con un parque de vehículos en la provincia que a 1 de enero del pasado año se elevaba a 252.735 unidades, la población estaba en ese momento en 307.651 personas, pero en el desglose municipal hay casos reseñables, como por ejemplo San Cibrao das Viñas, donde cada vecino toca a 1,28 vehículos, una situación claramente condicionada por el empuje que le da contar con el Polígono industrial, ya que hay censado 1.462 camiones, que sumados a los 4.301 turismos ya superan a la población (5.405), todo ello sin contar motocicletas, autobuses, tractores y otros tipos de vehículos.

Taboadela, Castro Caldelas, Avión, Castrelo de Miño, Carballeda de Valdeorras, Riós, Xunqueira de Espadanedo, San Cristovo de Cea, A Veiga, A Gudiña, Coles, Vilar de Barrio, Montederramo, Petín, Toén, A Teixeira, Pontedeva, Cortegada, A Merca, Gomesende, Esgos, Manzaneda, Vilar de Santos, Chandrexa de Queixa, Beade, Os Blancis, Laza, Baños de Molgas y Vilariño de Conso son los otros ayuntamientos que engordan la lista de municipios ourensanos con un padrónde habitantes que ya está por debajo de los vehículos anotados.

Esto supone también un empujón económico para las arcas de cada consistorio, ya que la Ley Reguladora de las Haciendas Locales establece que los ayuntamientos deberán gravar la titularidad de los vehículos anualmente, con tarifas que varían en función del tipo (turismo, autobús, camión...) y de la potencia o el tonelaje de los mismos.

La tónica general en la provincia es que los concellos establecen la cuota más baja que permite la legislación, que en el caso de los coches oscila entre los 12,62 y los 112 euros anuales o en los camiones entre los 42,28 y los 148,30 euros. 

La rebaja fiscal en la ciudad, un asunto sobre la mesa desde hace varios años

Como es habitual en cada ejercicio, el Concello de Ourense acaba de abrir el 1 de marzo el período de pago del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica, que se prolongará hasta el 5 de mayo y con el que el consistorio confía en ingresar algo más de 4,5 millones, con unas tarifas que difieren de lo que sucede en el resto de la provincia, ya que se aplica un coeficiente más elevado que incrementa los recibos a los que deben hacer frente los contribuyentes.

Esta diferencia y la posibilidad de aplicar una rebaja ha sido un tema de debate constante en los últimos años en el salón de plenos, especialmente a instancias de DO, que siempre sostuvo que se debía llevar la tasa al mínimo que permite la ley aunque en su primera oportunidad no ha adoptado ninguna medida a tal efecto.

Por el contrario, en los últimos ejercicios el Concello ha notado una merma en los ingresos que percibe por esta vía, ya que en 2015 la recaudación superaba los 4,8 millones, mientras que el pasado ejercicio apenas rebasó los 4,3 millones, en un contexto de bajada general para las arcas al reducirse notablemente el cobro por el Impuesto de Bienes Inmuebles. La edil de Facenda, Ana Fernández Morenza, avanzó posibles cambios fiscales en 2021, aunque sin mayor precisión. 

Los accidentes leves, a la baja en Ourense

A diferencia de en el conjunto de España, la provincia de Ourense registró una disminución en los accidentes de carácter leve que se produjeron en calles y carreteras, con una media de 30 al día, lo que supuso que a lo largo del pasado año hubo 11.191 siniestros de estas características, con daños materiales para los vehículos.

Son algunos de los datos que se desprenden de la nueva edición  del informe elaborado por Unespa, la patronal de las aseguradoras, que confirma que Ourense es la provincia gallega con menos golpes de chapa, por debajo de Lugo (12.482), Pontevedra (43.227) y A Coruña (49.576).

Además, aunque en esta ocasión no ofrece datos desglosados por provincia, se mantiene la tendencia en las calles españolas de tener más probabilidad de tener un accidente leve los lunes y los viernes, día en los que la movilidad es mucho más elevada. Los fines de semana, los siniestros caen en picado.

Por estaciones, el verano suele ser la época más tranquila en este aspecto, siendo mayo y octubre los meses más problemáticos. Esto se debe, según Unespa. a las lluvias típicas de primavera  y otoño, que complican en ocasiones la visión.