La pandemia ralentiza la aprobación de los presupuestos en las comarcas

La situación de incertidumbre social y financiera generada por la pandemia del coronavirus ha hecho mella en las corporaciones locales. A tres días de cerrar el año, de las diferentes capitalidades comarcales, solo Allariz ha aprobado el presupuesto para 2021. El grupo de gobierno nacionalista presidido por Cristina Cid llevó a pleno, en la última semana de noviembre, un montante de 6.018.260 euros para 2021. Las partidas, según Cid, se han ajustado para adaptarse a la nueva situación y sin incluir aquellas aportaciones que todavía están en el aire de otras administraciones. La dinamización económica es uno de los objetivos para el año próximo, cifrando en un millón de euros la inversión municipal para actuar en diferentes sectores, principalmente en el turístico. En cuanto a las inversiones, dotadas con 1.139.000 euros, se centrarán en la mejora de caminos y viales, la accesibilidad del consistorio y el acondicionamiento de los parques y zonas de ocio, entre otros. Desde Verín, el alcalde Gerardo Seone avanzaba a principio de mes dos importantes datos que marcarán las próximas cuentas, cuya previsión es llevarlas a pleno en los próximos días. La primera tiene que ver con la cuantía total, que rozará los 12 millones de euros, y la segunda, con la "importante" cantidad que se destinará a inversiones, 2,2 millones de euros. El Parque de Fontenova, la finalización del puente de Queizás , el saneamiento en Vilela o el nuevo puente de A Preguiza son algunas de las intervenciones más reseñables. En Xinzo de Limia, la alcaldesa socialista Elvira Lama confirmaba que el presupuesto está "completamente elaborado" y que tenían pensado llevarlo al pleno de mañana martes. No obstante, un requerimiento de Hacienda ha obligado a posponer su debate plenario. El grupo de gobierno municipal de Celanova, presidido por Antonio Puga de Celanova Decide con el apoyo del PSOE, está inmerso en la elaboración de los presupuestos para 2021. El Concello, que trabaja con los prorrogados de 2019, confía en aprobar en enero una hoja de ruta en la que primarán el apoyo al tejido asociativo, a los servicios sociales y al covid-19, además de costear actuaciones como la reforma del albergue o en materia de ahorro energético, logrando un doble objetivo medioambiental y de reducción de la factura eléctrica. El alcalde popular de Ribadavia, César Fernández, comentaba que llevan desde finales de noviembre trabajando en el borrador que, si todo va según lo previsto, terminarán en enero y acto seguido presentarán a la oposición con el objetivo de lograr un consenso. "Estamos pendientes de los ingresos que podamos recibir de otras administraciones y poder concretar las inversiones", confirmaba el regidor, quién adelantó que "los servicios relacionados con la gestión de la pandemia" tendrán un peso muy importante. En el Concello de O Barco de Valdeorras, el alcalde Alfredo García reconocía que este año han retrasado la elaboración de los presupuestos municipales dada la necesidad de atender "otras cosas" más prioritarias relacionadas con la pandemia. "Tenemos algo hecho, pero esperamos elaborarlos y aprobarlos en el primer trimestre del año que viene", reconocía García, quien adelantó que se centrarán en la atención social. En cuanto a las inversiones, el regidor socialista explicó que, tal y como realizaron este año, las actuaciones importantes irán con cargo al remanente de Tesorería. El pasado mes de noviembre aprobaron 15 obras por valor de 933.000 euros con cargo a esa partida. Ingresos externos En O Carballiño, el grupo de gobierno está empezando ahora con la elaboración de las cuentas. "Estamos pendientes de los ingresos del Estado y de la Xunta, todavía está todo en el aire", explicaba el alcalde, Francisco Fumega, quien espera a conocer de manera más pormenorizada las aportaciones de otras administraciones para hacer unos presupuestos lo más realistas posibles. No obstante, Fumega señaló que serán presupuestos sociales y de inversión. "Tenemos tres millones de euros de remanente de Tesorería, todo para invertir", dijo. Entre las intervenciones prioritarias para el grupo de gobierno está completar el plan de ordenación municipal, "queremos abrir muchas calles que llevan paradas años, estructurar la villa para el futuro". Donde también están "verdes" es en el Concello de Bande. La alcaldesa Sandra Quintas explicó que se pondrán con ellos al pasar las fiestas de Navidad, sin prever grandes variaciones con respecto a 2020. "El personal se llevará buena parte de los presupuestos y, para inversión, destinaremos fondos propios. A expensas de poder conseguir subvenciones de la Xunta o Diputación", señalaba Quintas con respecto a la financiación de importantes iniciativas que prevén desarrollar en 2021 como la explotación termal o la recuperación de la casa rectoral de Santa Comba de Bande. En Trives, la alcaldesa Patricia Domínguez reconocía que "la idea era presentarlos antes de que finalizase el año, pero hemos reducido tantísimo la deuda que ahora tendremos que reestructurar todo", dijo, anunciando que esta misma semana darán a conocer a los vecinos el trabajo interno realizado para saldar las "deudas" que se encontraron tras acceder a la alcaldía en 2019. De cara al año próximo, la regidora socialista reconoce que seguirá teniendo un peso específico el covid, pero "seguiremos trabajando para lograr subvenciones" que permitan llevar a cabo inversiones que generen empleo y mejoren la calidad de vida de los vecinos.