En el Pazo de Xustiza se celebraron sólo durante la pasada semana tres vistas por esta causa

Las peleas y multas provocan que 70 policías y guardias civiles sean agredidos cada año

Al menos 70 agentes de las fuerzas de seguridad son agredidos cada año. (Foto: Xoán Baltar)
Reyertas callejeras, multas de tráfico o fiestas en viviendas provocan que 70 agentes de las fuerzas de seguridad sean agredidos cada año. Sólo durante la pasada semana, el Pazo de Xustiza acogió tres juicios por lesiones e insultos a cinco agentes.
Una media de 70 agentes, sumando policías nacionales, locales y guardias civiles, son agredidos cada año, según datos facilitados por los tres cuerpos. La Guardia Civil es la institución que más agresiones registra con una media de 30 agentes.

La mayoría de las agresiones se produce después de que los agentes intervengan en una reyerta callejera o en el interior de un local hostelero. Le siguen las multas y los accidentes de tráfico, las fiestas en domicilios, los ruidos y las discusiones entre parejas, sobre todo cuando se producen en la vía pública.

La última de las agresiones tuvo como escenario la Praza do Corregidor y la víctima fue un policía local que estaba de servicio en la zona. Eran las tres de la madrugada del pasado 18 de abril y el agente se dispuso a identificar a un joven, con domicilio en Pontevedra, después de verse envuelto en una reyerta. Logró identificarlo, pero al darse la vuelta lo golpeó con la mano por la espalda.

A principios de mes, un vecino de Calvos de Randín, golpeó a un agente de Tráfico cuando lo paró en la carretera que enlaza Xinzo y Sandiás. El conductor no tenía carné de conducir y se abalanzó sobre el agente, al que llegó a golpear, al disponer a denunciarlo e intervenirle el vehículo. ‘Cuando paras a alguien en la carretera nunca sabes con quién te encuentras. Hay gente super educada, pero también los hay que no respetan a nadie’, afirman en la Comandancia.

Juicios


Los juzgados de lo Penal número 1 y 2 de Ourense acogieron sólo durante la pasada semana tres vistas orales por lesiones, insultos y amenazas a las fuerzas de seguridad. En el banquillo, se sentaron un vecino de O Barco y dos de la ciudad. El primero golpeó a dos guardias civiles cuando procedían a denunciarlo por dejar su vehículo mal estacionado en la avenida de El Bierzo. Los otros dos por agredir a policías nacionales durante el año 2008 cuando fueron requeridos, en uno de los casos por el dueño del bar de la calle Vicente Risco de la ciudad. El acusado, para el que el fiscal solicitó un año de prisión, presuntamente causó destrozos en el negocio. Al llegar los agentes e intentar identificarlo, se abalanzó hacia a uno de ellos al que agredió antes de que fuera reducido.

La otra agresión se produjo en la Praza Maior cuando los agentes intentaban identificar a un hombre sospechoso de haber perpetrado un robo en la caja registradora de una frutería.




Te puede interesar