Ignacio Benedeti (Venezuela, 1959) estrena en el OUFF el documental "Spitsbergen, O Gardián do Ártico", una llamada de atención sobre el cambio climático y rodada en super 8 y que forma parte de una serie de trece piezas de la serie "Stop calentamiento global", que grabará en diversos puntos del planeta.
Benedeti, que se estrena como director y guionista de un largometraje, aún confía en la especie humana. "El futuro del planeta lo veo muy mal, pero no está todo perdido. La tierra seguirá existiendo", reivindica.
"Spitsbergen, o gardian do Ártico" son las aventuras que el equipo de la película vivió a bordo del buque rompehielos Malmö en una iniciativa que una multinacional de fotografía le encargó a Benededi para probar sus nuevas películas en un rodaje real.
"Una de las experiencias que me dejó más tocado fue ver a una mamá osa tan escuálida. También cuando nos quedamos atrapados en el hielo en medio de la nada. Tuvimos que caminar 600 metros sabiendo que debajo de ti hay una profundidad de 140 metros", relata el director. Añade otra anécdota, ahora con humor: "Un miembro del equipo fue atacado por una foca y hubo que llamar al servicio de emergencia noruego".
Sobre el objetivo de la película, Benedeti quiere que sea un alegato a favor del medio ambiente. "Las imágenes son el testimonio de algo que va a desaparecer. El calentamiento global es muy grave". El guionista seguirá poniendo su granito de arena, aunque la pandemia del coronavirus lo haya retrasado todo. El siguiente documental iba a ser grabado en la Antártida, pero hubo que posponerlo. "Odisea en Groenlandia", una de las trece piezas finales, ya está producida y se exhibirá próximamente.
