Los pensionistas ganan poder adquisitivo al caer los precios

photo_camera Un grupo de pensionistas, durante una concentración frente a la Subdelegación de Gobierno, en 2018. (Foto: Óscar Pinal)
Las prestaciones crecieron un 4,32% en el último año, mientras la variación del IPC es del -0,2%

Con las pensiones instaladas en el centro del debate político desde hace ya muchos meses y la incertidumbre generada por la inestabilidad provocada por la falta de Gobierno, que deja en el aire qué sucederá en enero con el alza de las más de 108.200 prestaciones que se abonan en la provincia de Ourense, la mejoría en las nóminas que se perciben tras las subidas de 2018 y 2019 siguen siendo palpables, ofreciendo además un mayor rendimiento a los beneficiarios por el comportamiento que está mostrando en los últimos meses el Índice de Precios de Consumo (IPC).

Este indicador, que sirve para medir el "coste de la vida", ha sufrido, con datos cerrados de octubre, una variación interanual del -0,2%, mientras que el incremento de la pensión media en la provincia fue en el mismo período del 4,32%, mientras que en lo que respecta a la prestación de jubilación (en Ourense hay 68.002), la subida llegó al 4,18%.

Electricidad, agua o gas, lo que más ha bajado, mientras que alimentación, ropa o calzado han subido entre un 0,4 y un 1,9%

Aunque la variación media del IPC está en números negativos, no en todos los campos se han reducido los precios. Sí ha sucedido en los productos incluidos en el grupo de electricidad, gas y combustibles, cuya variación respecto a los datos de octubre de 2018 es del -9,8%.

Sin embargo, sí consta una ligera inflación en la "cesta de la compra", al haber aumentado los alimentos un 0,4% y las bebidas no alcohólicas un 1,9%, mismo porcentaje que en el calzado y superior al de vestido en general, que varió un 0,5%.

Los productos con más inflación en los últimos 12 meses son los bienes duraderos para ocio y cultura (6,8%), los servicios recreativos y deportivos (5,3%) y los de alojamiento (4%).


Octubre, al alza


Los datos divulgados ayer por el Instituto Galego de Estatística sobre el IPC en octubre permiten constatar que el décimo mes del año fue en el que más se dispararon los precios, un 1,5% respecto al índice de septiembre, un aumento empujado por el vestido y el calzado, que se disparó un 13,6%. La subida intermensual no era tan elevada en la provincia desde hace justo tres años, cuando el incremento fue del 1,6%.

Hasta septiembre, los precios en la provincia acumulaban una caída del -0,8%, mientras que con los datos conocidos ayer la variación desde enero vuelve a registros positivos, un 0,7%, que sigue siendo inferior a lo que creció la pensión media que se abona a los ourensanos en el mismo período, al pasar de 719,55 euros a los 730,65, lo que supone un alza del 1,54%, el doble que la inflación.

Los gastos de vivienda como el agua, electricidad o el gas es lo que más ha caído en lo que va de 2019, con una variación del -3,9%, mientras que en el extremo contrario se sitúa el transporte (una subida del 2,6%) o la sanidad (2,4%). La alimentación acumula una variación positiva del 1,1%.

Mientras, la evolución contrapuesta de los precios de los carburantes y la electricidad ha mantenido la inflación interanual de octubre del conjunto de España en el 0,1 %, la misma tasa de septiembre y el nivel más bajo de los últimos tres años. 


Terreno recuperado tras cuatro años con el 0,25%


Los incrementos aprobados por el Gobierno central en 2018 y 2019 ha permitido a los pensionistas recuperar el terreno que perdieron durante los cuatro años que transcurrieron entre 2014 y 2017, cuando los incrementos anuales del 0,25% ligados a una inflación acumulada del 2,4%, según refleja la evolución del Índice de Precio de Consumo, disminuyó significativamente el poder adquisitivo de los pensionistas, sobre todo los jubilados.

La perspectiva de cara al próximo ejercicio, marcado por la inestabilidad política en España al seguir un Gobierno en funciones, es algo menos halagüeña que en el último bienio, aunque los planes del presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, es aumentar un 0,9% las pensiones, tal y como recoge el documento presupuestario enviado a Bruselas hace unas semanas.

La previsión de la inflación a final de año es que ronde el 1%, lo que supondría que el poder adquisitivo de los pensionistas se mantenga. Con todo, la diferencia acumulada en los últimos meses les permitirá afrontar el "coste de la vida" algo más desahogados. n

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