La “pequeña Nicolasa" de Ourense ya no alardea: piden dos años de prisión para esta vecina de O Vinteún

Su nombre salió a la palestra a finales de noviembre de 2018 cuando fue detenida por la Policía Nacional de Ourense en relación a varias estafas en las que se hacía pasar por la mano derecha de altos cargos políticos, principalmente del Partido Popular, formación totalmente ajena a sus embustes. Alardeaba de amistades de alto copete y para ello aprovechaba la mínima ocasión para fotografiarse con políticos conocidos, aprovechando mítines o celebraciones. Nada más trascender la investigación policial se apodó a Mónica A.F., de 46 años y vecina del barrio de O Vinteún, como la 'pequeña Nicolasa' de Ourense. Pese a que a través de su abogado -ella nunca quiso declarar en sede judicial- dejó caer que era un mal entendido y que no había estafa alguna, la fiscalía acaba de presentar escrito de acusación en el que reclama dos años de cárcel por un delito continuado de estafa. Le aplica la atenuante de reparación del daño porque devolvió el dinero a todos los perjudicados salvo a un a mujer que le reclama algo más de 30 mil euros y de hecho está personada como acusación particular. La acusada, por su parte, ha recurrido ante la Audiencia provincial el auto del juez instructor que transforma las diligencias previas en procedimiento abreviado (equivalente al procesamiento en delitos más graves) para enfilar el juicio en alguno de los dos juzgados de lo penal. Mónica A.F. se daba aires y, según la fiscal, se hacía pasar por "amiga con influencia y poder para convencer a cargos políticos e institucionales de la ciudad". De esta forma, las acusaciones mantienen que ofrecía sus servicios para conseguir trabajos o solucionar problemas burocráticos. Eso sí, a cambio de alguna retribución económica. Consta en el procedimiento que M.C.S., en el año 2016, ingresó en la cuenta de la acusada 2.200 euros para que Mónica le consiguiera una trabajo a él, su pareja y también a su sobrina. La madre del anterior, también el dio 3.000 euros por un puesto para una nieta. Al cabo de tres años, "la pequeña Nicolasa" les devolvió el dinero. Pero hubo más víctimas. F.A.S. entregó 30.000 euros en diciembre de 2017 para que la acusada le consiguiera a su sobrina un puesto en la Diputación. Le reintegró el dinero en febrero de 2018 pero antes la relación se tensó (el perjudicado se apoderó de las llaves del coche de la inculpada para presionarla). Mónica A.F. supuestamente también tenía mano con las fuerzas de seguridad. F.B.E. denunció que le dio 5.000 euros por puesto para su hijo en la Guardia Civil. En 2018, voluntariamente le devolvió el dinero. A.L.V. sostiene que entregó 8.000 euros en dos ocasiones para que mediara a la hora de conseguirle un trabajo a su hija en el CHUO y otro a su marido en Cartelle. En este caso, también devolvió el dinero. No recuperó el monto entregado en 2016 una perjudicada en concreto, F.G.R., quien ejerce la acusación particular. En este caso, según su versión, Mónica se hizo pasar por juez y le pidió ayuda en una deuda que tenía con Hacienda su marido, con el que mantenía la sociedad de gananciales a pesar no convivir con él.