Le piden 10 años de cárcel por agresión sexual a su asistenta

La Audiencia Provincial de Ourense (ÓSCAR PINAL).
photo_camera La Audiencia Provincial de Ourense (ÓSCAR PINAL).
El acusado, un carballiñés, abordó a la víctima cuando le hacía la cama, según el ministerio fiscal

Un vecino de Carballiño, José Antonio F.B., se sentará el próximo día 22 en la Audiencia Provincial de Ourense para responder de un delito de agresión sexual, por el que el representante del ministerio fiscal le pide una condena de 10 años de cárcel. La víctima es una mujer que llevaba ocho meses trabajando como empleada de hogar en su vivienda.

Los hechos que van ser enjuiciados se remontan a la mañana del 19 de junio del 2017 después de que la trabajadora llegara a la vivienda para hacer las tareas domésticas. La fiscalía considera probado que el acusado, tras bromear con la empleada cuando le estaba haciendo la cama, la empujó y se puso de rodillas encima de ella, agarrándole con una mano ambos brazos por encima de la cabeza, mientras que con la otra la manoseaba en los senos, al tiempo que le decía, según el escrito de acusación, "que eran muy bonitos y que tenía ganas de sentir a una mujer".

La asistenta doméstica, según el ministerio público, logró zafarse del  procesado y continuó con las  tareas de limpieza. Pero José Antonio F.B., según recoge el escrito de la fiscalía, volvió a agarrarla por la cintura y, tras un forcejeo -la víctima salió hacia el salón- la empujó contra el sofá y se colocó encima de ella, inmovilizándola con las dos rodillas. Según la versión del fiscal, la trabajadora comenzó a darle patadas y  forcejear con el procesado para que la dejara, pero éste le bajó la malla y la penetró. A continuación, según la fiscalía, se levantó  y comenzó a masturbarse hasta eyacular delante de ella. Media hora después, la víctima, según la acusación pública, abandonó la vivienda.

Indemnización

Los hechos fueron calificados  como constitutivos de un delito de agresión sexual y la fiscalía solicita que el acusado sea penado con 10 años de cárcel y que, una vez cumplida la condena, esté siendo vigilando otros 10 años. También pide que no se acerque a la víctima durante 15 años y que la indemnice con 20.000 euros. 

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