La Jefatura Provincial de la Dirección General de Tráfico de Ourense volvió a detectar en sus dependencias a un hombre usando medios tecnológicos fraudulentos para copiar en la prueba teórica para sacar el carné de conducir de clase B.
En esta ocasión se trata de un vecino de Tarragona, aunque en el mes de febrero se notificó que un vecino de Girona también había intentado usar medios tecnológicos para copiar en el examen de conducir. Ahora fue localizado cuando intentaba utilizar un dispositivo que consiste en una cámara insertada en la vestimenta del aspirante, un transmisor en formato tarjeta de crédito y un pinganillo, que era por donde presuntamente recibía las respuestas correctas.
La DGT agradece a la Guardia Civil de Tráfico la colaboración para detectar lo que estaba haciendo este aspirante. Esta conducta podría implicar una sanción de 500 euros y la imposibilidad de presentarse al examen para sacar el permiso de conducir durante seis meses.