A escasos días de entrar en el último cuatrimestre del año, siguen conviviendo luces y sombras en la ejecución del plan diseñado en los presupuestos de Xunta y Gobierno central para el actual ejercicio 2022, una vez que varios de los proyectos incluidos en sus respectivas cuentas distan de estar siguiendo el ritmo deseado para pasar del papel a la realidad, ya que de nada vale consignar año tras año partidas presupuestaria si luego no se ejecutan.
Xunta
Las principales inversiones que sí están en marcha, por lo que respecta a la apuesta del Gobierno gallego -que destinaba en el presupuesto de 2022 algo menos de 1.500 millones para el gasto territorializado en Ourense-, tienen que ver con las mejoras en sanidad. La gran apuesta es la nueva ampliación del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense, que requiere de un desembolso de unos 50 millones y que está en marcha desde primavera, avanzando con paso firme.
Sin salir del recinto, también parece haberse desbloqueado la implantación de la unidad de Medicina Nuclear tras una primera licitación desierta, mientras que se está redactando el proyecto para construir el Centro Integral de Salud Nóvoa Santos, trasladando allí el PAC e incorporando nuevos servicios. Los hospitales comarcales también están captando la atención de la Xunta.
En materia de infraestructuras, todavía no es posible ver obras de proyectos como la mejora de la OU-540 hasta la frontera portuguesa o la conclusión de la circunvalación este, pero sí se está avanzando en los despachos. También sigue la apuesta por la construcción de nuevas sendas peatonales y ciclistas para mejorar la seguridad vial.
Los principales incumplimientos son, en el contexto de la escalada de precios de los materiales y la alta inflación, la culminación del Centro de Atención a Discapacitados mayores de 21 años y el parque acuático de Monterrei. El primero de los equipamientos lleva parado desde septiembre de 2021 y no fue hasta el pasado mes de julio cuando Política Social logró desencallar la nueva licitación tras rescindir el contrato con la primera adjudicataria. Esta semana concluirá el plazo de presentación de ofertas para así poder evaluarlas y contratar de nuevos los trabajos restantes, ya que quedan todavía por ejecutar ocho millones.
Problemas similares pararon la primera fase del parque acuático de Monterrei, que ha inutilizado las piscinas del complejo este verano. Secretaría Xeral para o Deporte ultima en estos momentos los trámites administrativos para sacar de nuevo a concurso la obra y que así pueda estar lista para la próxima temporada estival.
Tampoco se sabe nada, por otra parte, del concurso de idea del que saldrá el diseño de la futura sede de la Xunta en Ourense, que se ubicará en As Lagoas tras la adquisición de parcelas por ocho millones. El proyecto del ecobarrio es otra asignatura pendiente del Gobierno gallego cuatro años y medio después de su presentación.
Estado
En la rendición de cuentas del Gobierno central, que preveía invertir este año 157 millones, pesa sobremanera el nuevo incumplimiento en el desbloqueo de la estación intermodal, para lo que se reservaba en las cuentas de 2022 una importante partida. Aunque la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, aseguró que las obras saldrían a concurso antes de julio, ahora el Ejecutivo ya retrasa al último trimestre del año dar luz verde al proyecto.
Esto opaca en parte el impulso dado a las obras de la línea de alta velocidad pendientes desde Taboadela, trabajándose a buen ritmo para construir los primeros tramos de la variante exterior hasta Seixalbo, aunque cada vez son más las dudas sobre su culminación por Montealegre y hasta la estación. No hay queja con la evolución de los trabajos para modernizar el corredor ferroviario entre Ourense y Lugo.
En materia de carreteras, ha habido buenas noticias, tras dos décadas esperando, con la contratación de las primeras obras de la circunvalación norte de la ciudad entre Eirasvedras y Quintela, así como otros avances técnicos en la continuación de la A-56 (Ourense-Lugo). Sin embargo, preocupa especialmente que uno de los proyectos a los que se destinaban en los presupuestos más fondos como la circunvalación de O Barco tenga un horizonte claro de incertidumbre, ya que sigue parada en el momento que tendría que estar a punto de finalizarse.
Otro de los proyectos por los que la provincia espera desde hace lustros es la reforma del Museo Arqueolóxico. Hallazgos inesperados y otras vicisitudes han condenado la evolución de las obras, sin fecha en estos momentos pese a los fondos consignados. Tampoco se sabe nada de otra vieja promesa como la nueva sede de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil.
