Cuatro jóvenes carballiñesas han puesto en marcha la primera protectora de animales en la comarca de Carballiño.
Las mueve una especial sensibilidad por las mascotas abandonadas, su deseo compartido de conseguir familias de adopción y velar por su bienestar. 'Pro Animales Carballiño' se constituyó durante el pasado mes de agosto, si bien, su actividad se remonta a tan sólo dos meses, y en estrecha colaboración con la perrera municipal. Eran conscientes de que existía un vacío en lo relativo al cuidado sanitario de los animales y también en la captación de personas interesadas en la adopción. Un papel que han asumido de forma voluntaria y que está dando ya sus buenos resultados.
La presidenta de la protectora, María Vázquez, y la secretaria, Graciela Daparte, consideran que este es un buen momento para darse a conocer, para que 'en Navidad no se compren perros sino que se adopten, los hay de diferentes razas, cruzados, y están desparasitados, vacunados, esterilizados, con pasaporte y microchip, todo por sólo 60 euros', indican. Todo ello cuesta bastante más, pero también cuentan con colaboradores, desde un abogado que les prepara el contrato de adopción hasta un veterinario o particulares que hacen donativos en metálico. Lo de la adopción implica una serie de compromisos por parte del nuevo dueño del animal, además de acceder a que la protectora haga un seguimiento posterior para comprobar si está bien cuidado.
Hasta su llegada, en la perrera se cedían sin más los animales a quién los solicitaba. 'Es normal porque siempre está desbordada su capacidad', señala Graciela Daparte. Asimismo, la asistencia sanitaria ha mejorado sustancialmente porque 'no queremos dejar a ningún animal sin asistencia, ya sea suministrándole los medicamentos que necesita, ya sea con una operación, por eso necesitamos dinero y toda la colaboración posible, tenemos una cuenta abierta en Caja Rural'.
Las redes sociales se han convertido en sus aliadas para captar la atención y promocionar las adopciones, y en dos meses no les ha ido nada mal, ya que han colocado a más de una veintena de perros.
Las autoridades municipales han recibido con los brazos abiertos a estas jóvenes que realizan el trabajo desinteresadamente. La colaboración, no obstante, no se ha formalizado oficialmente, teniendo en cuenta que la perrera pasará próximamente a ser gestionada por la Diputación.
La presidenta de la protectora, María Vázquez, y la secretaria, Graciela Daparte, consideran que este es un buen momento para darse a conocer, para que 'en Navidad no se compren perros sino que se adopten, los hay de diferentes razas, cruzados, y están desparasitados, vacunados, esterilizados, con pasaporte y microchip, todo por sólo 60 euros', indican. Todo ello cuesta bastante más, pero también cuentan con colaboradores, desde un abogado que les prepara el contrato de adopción hasta un veterinario o particulares que hacen donativos en metálico. Lo de la adopción implica una serie de compromisos por parte del nuevo dueño del animal, además de acceder a que la protectora haga un seguimiento posterior para comprobar si está bien cuidado.
Hasta su llegada, en la perrera se cedían sin más los animales a quién los solicitaba. 'Es normal porque siempre está desbordada su capacidad', señala Graciela Daparte. Asimismo, la asistencia sanitaria ha mejorado sustancialmente porque 'no queremos dejar a ningún animal sin asistencia, ya sea suministrándole los medicamentos que necesita, ya sea con una operación, por eso necesitamos dinero y toda la colaboración posible, tenemos una cuenta abierta en Caja Rural'.
Las redes sociales se han convertido en sus aliadas para captar la atención y promocionar las adopciones, y en dos meses no les ha ido nada mal, ya que han colocado a más de una veintena de perros.
Las autoridades municipales han recibido con los brazos abiertos a estas jóvenes que realizan el trabajo desinteresadamente. La colaboración, no obstante, no se ha formalizado oficialmente, teniendo en cuenta que la perrera pasará próximamente a ser gestionada por la Diputación.
