Consolidó el modelo iniciado en Ourense en 2009, con cooperación entre colegios y comerciantes
El pedagogo italiano Francesco Tonnucci inspiró los caminos escolares seguros en Galicia a través de "La ciudad de los niños", un concepto de urbe humanizada pensada para los peatones. A pesar de que Ourense fue pionera en adoptar rutas para los colegiales en 2009, Pontevedra es hoy la referencia de ciudad de los niños, que en 2010 comenzó una campaña con ideas que ya funcionaran antaño en O Couto. José Delgado, el presidente de la asociación de vecinos de este barrio de la ciudad, asegura que "deberíamos participar. Un abuelo llevando doce niños al colegio estaría feliz y sería beneficioso para todos. Son propuestas interesantes que liberan a los padres".
Implicación ciudadana
"A escola implícase na formación ambiental e no contexto urbano, creando sinerxias coa cidade", explica uno de los puntos del programa impulsado por el Concello de Pontevedra. En el proyecto piloto de O Couto los escolares fueron protagonistas de campañas de movilidad en la calle, con su posterior estudio en el aula.
Unos 300 comercios de Pontevedra llegaron a interesarse por colaborar en los caminos: un teléfono de emergencia y una pegatina distintiva en el local ayudaba a los menores si tenían algún problema durante el proyecto. En Ourense, los comercios de O Couto y posteriormente los de San Francisco colaboraron de la misma forma. Las asociaciones de vecinos cumplieron un papel similar, igual que los guías voluntarios situados en puntos estratégicos del itinerario escolar.
En A Coruña también funciona "Ancas", patrullas escolares de voluntarios puestas en marcha desde el Concello y Stop Accidentes. También en Galicia, localidades como A Estrada y O Grove se han sumado recientemente al camino escolar. En el ámbito estatal, Vitoria es una referencia en cuestiones de movilidad.
"EN O COUTO SE VOLVERÍA A COLABORAR"
La implicación de toda la sociedad conseguida en otras ciudades gallegas fue una de las claves del éxito del camino escolar seguro en Ourense. Los comerciantes del barrio de O Couto fueron los primeros en unirse a la red de colaboradores en el programa, una situación que desde la asociación de Couto Centro cree que se repetiría: "Habría que intentar implicarse, y más con tantos atropellos. La gente del Couto se suma pronto a este tipo de campañas y estoy seguro de que volveríamos a activarla"
En Pontevedra, la pacificación del tráfico, estableciendo la velocidad máxima a 30 kilómetros por hora, contribuyó de forma decisiva al éxito del camino escolar, que el pasado mes de enero eliminó a los voluntarios situados en puntos estratégicos al entender que la autonomía de los escolares se había conseguido.
