Jesús Vázquez no prevé nuevos encuentros con los demás partidos
El PP se prepara para gobernar en minoría en la ciudad, más convencido de esta posibilidad desde que los socialistas descartasen un pacto con el líder de Democracia Ourensana. Con todo, la indefinición y la falta de acercamiento de unos partidos a otros mantiene la inquietud entre los miembros de la futura Corporación local. Hay que tener en cuenta que los resultados electorales del domingo 24 de mayo y los pasos dados por DO mantienen en vilo el futuro del gobierno de la ciudad; de hecho, ni se ha planteado el traspaso de poderes que ya se efectuó con total normalidad en ciudades como A Coruña o Santiago, debido a que todavía se desconoce quién liderará el Consistorio.
Los ourensanos tendrán que esperar probablemente a que llegue el día 13 para conocer la identidad su alcalde, aunque la falta de acuerdo entre los partidos con inferior número de votos favorece inicialmente el gobierno en minoría del PP, en calidad de fuerza más votada, lo que le daría el gobierno local en segunda votación.
El propio responsable de DO, Gonzalo Pérez Jácome, que dijo tener un "as en la manga" y que anunció una estrategia para hacerse con la alcaldía el próximo sábado, precisaba ayer que la situación para lograr ese objetivo es muy compleja. Él lo atribuye al interés de poderes económicos para apartarlo del control del Concello, por lo que ve reducidas sus posibilidades de lograr formar gobierno en el Consistorio de la Praza Maior.
Mientras el candidato socialista, Vázquez Barquero, volvió a su acuerdo de silencio tras declarar que no pactaría con DO, el cabeza de lista del PP y candidato a alcalde, Jesús Vázquez, reconocía ayer que la indefinición y la espera hasta dilucidar el gobierno de la ciudad están dañando los intereses de la ciudad porque él estaría dispuesto, antes de tomar posesión, a comenzar gestiones y reivindaciones ante otras administraciones para lograr los proyectos que se plantea con destino a la ciudad de Ourense.
Vázquez descartó un nuevo encuentro con Pérez Jácome tras el fracaso de la reunión cinco días después de los comicios y remite, como los demás, al día 13 para conocer qué grupo gobernará la ciudad pero cree que la situación favorece un gobierno en minoría que él está dispuesto a presidir, aún sin conocer las supuestas estrategias que esgrime Jácome pero que no revela.
