En su ronda de actos de precampaña, los candidatos del PP a Congreso y Senado se acercaron ayer hasta la estación de Taboadela para reivindicar al Ejecutivo central el cumplimiento en los plazos del AVE, molestos con las manifestaciones del pasado domingo del delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, en las que retrasaba ya a 2021 la puesta en servicio de la línea.
Así, los candidatos populares rechazaron cualquier modificación de las fechas comprometidas, exigiendo que en 2020 los trenes "estean funcionando con todas as garantías de seguridade e poidan mercarse billetes".
El PP se refirió, además, a la variante exterior, el último tramo de la línea del AVE que ni siquiera ha salido a licitación. "É un tramo indispensable cuxa construción seguirá a esixir o PP", señalaron los candidatos, omitiendo que fue durante la etapa como ministra de Fomento de Ana Pastor cuando se reformuló el recorrido de la variante –que en un principio no existía, planificándose la integración urbana por el actual trazado– para reducir la inversión, modificándose también en el plazo de finalización de las obras de la línea de alta velocidad, pasando de 2018 a 2019.
Con todo, los candidatos del PP mostraron su preocupación por el tramo entre Taboadela y Ourense, asegurando que "seguimos agardando explicacións" sobre las medidas que tomará Adif "para evitar que a declaración de impacto ambiental do tramo Seixalbo-Ourense perda a vixencia como consecuencia de que non foron licitadas as obras".
Sobre el primer tramo de la misma, el PP recuerda que Adif publicó en marzo un anuncio en el Boletín Oficial de la Unión Europea anunciando la licitación para el segundo semestre. Los populares entienden que "non caben escusas", asegurando que hay partida presupuestaria suficiente.