Nueve de los 25 detenidos en la operación "Straperlo" contra el contrabando de tabaco ingresaron en prisión tras prestar declaración en los juzgados de la ciudad, por ser considerados líderes de la organización –se encargaban de labores de seguridad y del transporte–. El resto de los detenidos, como trabajadores, fueron puestos en libertad, con la prohibición de salir del territorio nacional.
La operación, llevada a cabo de forma conjunta entre la Policía Judicial de la Guardia Civil de Ourense, Vigilancia Aduanera y el grupo Greco de la Policía Nacional, supuso la incautación de 150 toneladas de tabaco y 250.000 cigarrillos de marca falsa Marlboro –con un valor de más de 21 millones de euros en el mercado negro–.
La operación
La operación arrancó a principios de 2020, bajo el conocimiento de que personas de nacionalidad rumana y portuguesa habían alquilado naves de grandes dimensiones para dedicarse a la fabricación ilegal de grandes cantidades de labores de tabaco de forma ilegal. El laboratorio clandestino se encontraba en una nave industrial de Cambeo (Coles), donde se incautó la maquinaria y se detuvo a 21 personas, la mayoría de nacionalidad ucraniana y moldava.
El resto de los detenidos, de origen rumano y portugués, fueron interceptados en domicilios de la ciudad y de Pontevedra, donde también se intervinieron tres vehículos.
Los agentes realizaron registros en una nave en Valladolid, donde guardaban material, así como una nave en Ponteares (Pontevedra), donde fue intervenida gran cantidad de materia prima. La banda traía picadura de tabaco hasta Coles, donde realizaba los cigarrilos, que se iban a vender en distintos países de la Unión Europea.
