Dos hombres de origen albanés acusados de perpetrar una docena de robos en viviendas de Pontevedra y Ourense aceptaron este miércoles en un juzgado de Santiago una condena de cuatro y cinco años de prisión, respectivamente así como su expulsión del país.
Ambos llegaron a un acuerdo con el fiscal, ante el que, además de las penas, se comprometieron a abonar por adelantado las indemnizaciones a las víctimas, un total de 10.000 euros. Inicialmente, la Fiscalía pedía para uno de los acusados nueve años de prisión y seis para el otro, pero le rebajó la solicitud de condena al reconocer ambos los hechos.
Estaba acusados de pertenecer a una banda a la que se le atribuyen robos en once viviendas y que ejecutaron entre el 26 y el 30 de noviembre de 2018, en las provincias de Pontevedra y Ourense. Fueron detenidos por la Guardia Civil en un control en la A-52. Llevaban en el coche una bolsa con las joyas.