Las falsificaciones también traen de cabeza a los comerciantes locales, que ven cómo se venden impunemente en negocios de origen chino. Esta inquietud se extiende entre los comerciantes de todo el Estado. Hasta el punto de que la semana pasada se celebró una reunión entre la Federación Española de Comercio y el ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Manuel Soria, donde participó una delegación de la federación ourensana, para plantear los problemas derivados de la venta de productos falsificados chinos.
Durante el año 2010, la Agencia Tributaria intervino un total de 10.451.343 de productos falsificados con un importe que asciende a los 127 millones de euros, sin contar las 7.951.494 cajetillas de tabaco falsificado con un valor de 28 millones de euros, que en su mayoría ya provienen también del gigante asiático.
Sin contar con el tabaco, el 58,7% de estos productos aprehendidos falsificados fueron artículos de oficina, el 8,5% accesorios de vestuario, el 3,3% cosméticos y perfumes, el 2,5% ropa y otro 2,5% calzado deportivo. Por valor, los accesorios de vestuario suponen el 19,31 % del valor aprehendido, con 24 millones de euros; seguidos de gafas con el 13,55% del valor, 17 millones de euros.
Sin contar con el tabaco, el 58,7% de estos productos aprehendidos falsificados fueron artículos de oficina, el 8,5% accesorios de vestuario, el 3,3% cosméticos y perfumes, el 2,5% ropa y otro 2,5% calzado deportivo. Por valor, los accesorios de vestuario suponen el 19,31 % del valor aprehendido, con 24 millones de euros; seguidos de gafas con el 13,55% del valor, 17 millones de euros.
