Pasó lo que pasó

Queda aprobado el salario máximo

El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, durante un pleno del Concello. (Foto: Martiño Pinal)
photo_camera El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, durante un pleno del Concello. (Foto: Martiño Pinal)
El Concello de Ourense ha irrumpido en el debate salarial como de costumbre, pagando la ronda con dinero público. Los parias laborales aspiran a 950 euros, el alcalde dobla la apuesta: 86.000 al año.

El paro ya es un problema menor

El año laboral no ha empezado bien. No debiera ser algo llamativo porque la costumbre estadística nos aboca a un enero de paro. Ourense se ha apuntado al espíritu de la hormiga, trabajar en el sector servicios en verano y aguantar el resto del año después de haber ensilado algunos euritos. Somos gente afanosa, al contrario que la cigarra, de farra siempre, cantando en el verano, en vez de poner copas en un pub o servir churrasco en la parrillada del pueblo como cualquier empleo estacional y a tiempo parcial que se precie.

Este año, confesamos, había cierto margen a la mejoría. Creímos que tendrían reflejo estadístico las políticas laborales del alcalde Jácome, pero quizá para febrero. El paro de enero metió una dentellada de las suyas, 144 curritos a la sombra y 1.400 afiliados menos a la Seguridad Social en un solo mes, que es como si Adolfo Domínguez echase el candado y dejase en la calle hasta la belleza de la arruga. A Jácome estas cosas le abren las carnes como aquel peine de púas de hierro con el que se hurgaba en las entrañas de los mártires hasta abrirle, efectivamente, las vísceras. Como aquel Quijote dispuesto abrirse también las carnes a azotes con tal de complacer a su señora doña Dulcinea del Toboso.

El alcalde lamenta mucho los sufrimientos de los parias, se apiada de los huérfanos de trabajo. Tiene, fijándose bien, el mismo perfil de filántropo de Vicente Ferrer. Este, dedicando su vida a los desprotegidos del tercer mundo, aquél empeñado en que a sus amigos no le falte de nada, sobre todo dinero público. Invitando siempre, pagando otros. Ahora que, fijándonos bien, al regidor le va más el papel de entomólogo por su capacidad de rodearse de cigarras que no cesan de estridular noche y día por las dependencias municipales. Una nueva bandada de asesores asomarán por la Praza Maior. Atentos al paro de febrero. Baja, seguro. Y, sino, que al menos canten, como la cigarra.

Salario Mínimo a 86.000 euros

El miércoles este periódico soltaba el latigazo del paro, insisto. De las 18.000 personas apuntadas en Ourense el 40% no cobran prestación y los que perciben la más alta (la retributiva) se quedan por debajo de los 800 euros de media. La oportunidad es un don, pero no se derrama como la gracia. Con la visión de alguien que va a un velatorio a felicitar en vez de a dar el pésame, el día en el que se conocían los datos de paro y el pinchazo en la Seguridad Social las cocinas municipales servían un nuevo plato fast food: el alcalde Jácome quiere fichar a un directivo para que (se supone) haga lo que ni él ni sus concejales ni sus asesores son capaces de hacer: dar una en el clavo.

Se le paga 86.000 euros de dinero público y punto. Más de 700.000 en asesores, más de 460.000 en el sueldo del alcalde y sus concejales, casi 150.000 en dos directivos. Aquel día los sindicatos, que siguen sin decir ni pío sobre estas regalías, pedían salarios dignos, la subida del Salario Mínimo Interprofesional y derogar la reforma laboral. La de Jácome es, de lejos, la mejor. Lo siguiente será el aplauso sindical.

Hay aquí muchas razones para fumar

Hacienda dice que el año pasado los ourensanos se han gastado 70 millones de euros en tabaco. Se fuma menos, menos pitillos, más tabaco de liar. Antes un tipo fumaba un Marlboro y cabalgaba con la mirada infinita, con una buena dosis de nicotina era imprescindible. Una voz en off invitaba a ir al mundo del sabor. ¿Me das fuego? Esa era una pregunta para romper el hielo, preludio de una historia o de una calabaza. El tabaco ha sido siempre el desideratum, el placebo para acabar con la timidez, el bastón para cuando no sabías qué hacer con las manos.

Sara Montiel creía que un cigarrillo encendido era la mejor terapia para esperar a la persona amada. Los paritorios estaban antes llenos de ceniceros atiborrados de colillas de padres aparentemente nerviosos por la espera de la criatura. La madre sudaba por los dolores del parto y los maridos fumaban como salida terapéutica. La desesperación esperando neonatos tiene a media provincia fumando. Hay mucho por lo que fumar (o volver a fumar en Ourense), cada uno sabrá las razones.

La lotería es, sin duda, una mina

Por la semana  nos hemos enterado de que igual somos ricos por atesorar coltán allá por Viana do Bolo. El material con el que se hacen muchos dispositivos electrónicos se encuentra en la muy baqueteada Viana do Bolo. Esta provincia es así: una semana descorcha botellas porque tocan 1,9 millones de euros de la lotería en Maceda y a la siguiente Viana puede ser Eldorado, una ciudad imaginaria, que surgió en la España colonial más por el hambre de riqueza que por el afán del trabajo.



El portafotos

OURENSE (CENTRO CULTURAL MARCOS VALCÁRCEL). 11/04/2019. OURENSE. Antonio Nespereira modera el Foro La Región

Cuando no queda nadie en la aldea, cuando crees que ya la soledad se ha devorado todo, resulta que aún queda el cura. José Angel Feijoo Mirón es cura de los de uniforme. Se apellida Feijoo y algo de Os Peares conserva, pero no es ese Feijoo que está pensando, aunque sea el mismo Os Peares. Entre otras responsabilidades es delegado de Cáritas y con la misma sonrisa y su precioso timbre de voz puede rezar el Padrenuestro o presentar la Memoria de Cáritas diciendo que la pobreza existe aunque se esconda o la ignores.

Ha recibido el encargo del Obispado para rearmar a la comunidad católica, despertar vocaciones y detener la pendiente por la que baja la fe a gran velocidad. Muchas son las urgencias de la Iglesia, que ve como su patrimonio también envejece, pero no es esa la carcoma peor que debe combatir. La institución está siendo escrutada desde el Papa al último monaguillo. Ángel Feijoo es uno de los rostros más reconocibles de la Iglesia en Ourense, también uno de los más defendibles. Interesante uno de los retos que acaba de asumir: que en la aldea quede alguien más que el cura, que es el que queda cuando nada queda. Decía André Maurois que "cultura es lo que queda después de haber olvidado lo que se aprendió". 



Al poner la lupa

Ourense siempre está a la derecha

RIVELA (COLES) 25/01/2020.- Embarcadero de Rivela y vistas Miño. José Paz

Cantaba Siniestro Total: "Oiga, por favor, ¿dónde esta el cuarto de baño? Oiga, por favor, ¿dónde queda la salida? Oiga, por favor, ¿dónde está su (...) madre? Oiga, por favor, ¿dónde queda la avenida? Bajando, al fondo, al fondo a la derecha". Ourense, valga el juego de palabras, va bajando y a la derecha. Tome la primera a la derecha hasta llegar a Ourense. Siga todo recto y al llegar a Ourense, a la derecha. Si va a Ourense, vaya siempre por la derecha. A la derecha siempre, todo recto, hasta llegar a Ourense. No sé, por seguirle el juego a Siniestro Total y ver la foto, con Ourense a la derecha. Y con óxido.

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