El Juzgado de lo Penal número 2 de Ourense condenó este viernes a L.A.M.I., de 52 años, a quince meses sin carné y una pena multa de 6 meses a razón de 10 euros día (1.800 euros en total) por un delito contra la seguridad vial por conducir a 224 km/h en un tramo limitado a 100 km.
El condenado fue interceptado el pasado 24 de julio por la Guardia Civil en la A-52, a la altura del municipio de Toén, después de que el radar detectase la velocidad del vehículo, un Porsche Panamera. La jueza dictaminó que, pese a las alegaciones de la defensa acerca de la imagen flasheada del radar, las pruebas son suficientes para inculpar al acusado.
El operador del radar aseguró, durante la vista judicial del pasado 6 de septiembre, que había memorizado los dos primeros dígitos de la matrícula (que coinciden con la del turismo del acusado) y así se los comunicó al compañero notificador, que le dio el alto al conductor a unos 2,5 kilómetros. Además, el resultado de las mediciones obtenidas por el sistema de detección móvil se considera correcta por estar "debidamente homologado y calibrado, según consta en el certificado de verificación" del propio aparato.
El relato de la jueza también recoge que la matrícula del vehículo sale "claramente identificada" y que el único problema es la identificación del conductor en aquellos casos en el que no puede ser detenido el vehículo inmediatamente después de cometer el delito. En este caso, un agente pudo identificarlo minutos después.
El Ministerio Fiscal solicitó la imposición de la pena mínima, dada la ausencia de antecedentes penales del acusado, que prefirió no realizar trabajos en beneficio de la comunidad.
