Los veinte pasos fronterizos entre Ourense y Portugal, exceptuando el de Feces (Verín)-Vila Verde (Chaves), continuarán cerrados al menos hasta el próximo día 14 de mayo para evitar la propagación de coronavirus.
Los conductores que utilizaban ayer el paso oficial de Feces para desplazarse a Ourense o hacia Chaves, aseguraban entender la moratoria, pero sus palabras dejaban patente las incomodidades que les está ocasionando el cierre de la frontera. "Trabajo en la construcción en Ourense y todos los días tengo que recorrer más de 200 kilómetros", lamente un conductor luso, Joaquín Pereira, puntualizando que a este paso se quedará a vivir en Ourense. "Nunca pensé en alquilar casa porque soy de la zona de Montalegre y hasta ahora cruzaba por el paso de Baltar. Me quedaba mucho más cerca", afirma.
Tras este conductor circulaba Alberto Rodrigues en dirección a Xinzo. Este automovilista, natural de Viheira do Miño, aprovecha esta época para distribuir patatas de siembra. "Otros años entraba por los pasos de Lobios o Baltar y me era más cerca. Ahora, tengo que dar un largo rodeo. No llevo contabilizados los kilómetros, pero son muchos. No gano para combustible", lamenta.
Los pasos fronterizos están cerrados con grandes bloques de hormigón y el de Feces-Vila Verde está literalmente blindado, en el sentido luso por la GNR. Del lado español, por la Policía Nacional. Desde que ese hizo efectivo el cierre de las fronteras y a fecha del pasado martes, 22.206 vehículos cruzaron desde Ourense hacia el país vecino, según datos facilitados por el Ministerio de Administración Interna luso. El Ministerio del Interior no dio a conocer las cifras, pero el volumen de circulación es muy similar en ambos sentidos, según fuentes policiales. Antonio García esperaba ayer con su coche a pasar el control policial. "Voy a Chaves por motivos de trabajo y regreso por la noche, pero esto es una incomodidad. Hay muchos trabajadores que optaron por quedarse en casa ante las largas distancias que tienen que recorrer", afirma.
Los policías portugueses y españoles solamente dejan cruzar a los conductores que acreditan el desplazamiento.
"La situación es grave"
Tanto el presidente de la Cámara Municipal de Chaves, Nuno Vaz, como el de Montalegre, Orlando Álves, entiende las incomodidades que está generando a la población el cierre de la frontera, pero consideran que la decisión es acertada. "La situación es grave. Tenemos una población envejecida y debemos protegerla", apuntó Nuno Vaz.
Su homólogo Orlando Álves, recuerda que no está escatimando esfuerzos contra la pandemia. El mandatario puso en marcha, entre otras iniciativas, un servicio para hacer la compra, incluidas las medicinas, "a todos los vecinos que lo pidan. Tenemos medidas restrictivas y de momento no tenemos ningún positivo", apuntó.
El balance de la pandemia en Portugal era a fecha de ayer 18.091 casos positivos, 599 fallecidos y 383 recuperados. De estos, 27 de los enfermos están en municipios de la Raia. La población lusa permanece confinada en sus casas y las medidas que adoptó el Gobierno luso son similares a las puestas en marcha en España. Entre las excepciones son los centros penitenciarios. Fueron puestos en libertad 1.006 reclusos desde el pasado 16 de marzo con el objetivo de evitar contagios.
