La Guardia Civil redoblará de nuevo los controles durante el fin de semana para evitar desplazamientos, sobre todo a segundas viviendas, cuando no haya una causa justificada. El objetivo de la vigilancia es que la ciudadanía permanezca en sus casas para frenar la propagación del coronavirus, pero los agentes detectaron que muchos conductores agudizaron el ingenio para salir sin temor a ser multados.
La principal excusa es repostar combustible, algo que está permitido. La trampa consiste en poner lo mínimo posible, cinco euros, y a las pocas horas hacer otro desplazamiento para repostar otros cinco. Este extremo fue confirmado en varias estaciones de servicio, que inicialmente achacaban la poca cantidad de carburante que reponían algunos conductores a la actual situación de alarma y los escasos desplazamientos.
La Guardia Civil estableció controles en torno a las gasolineras y, tras detectar conductores que repostan más de una vez al día, "primero se les informó de obligación de permanecer en sus casas. De reincidir, se multa", aseguraron fuentes del Instituto Armado.
Los desplazamientos al supermercado a cuenta gotas también son excusas para burlar el confinamiento
Las desplazamientos para comprar en los supermercados también están autorizados. Tanto los agentes de Tráfico como las distintas patrullas del rural ya pararon y sancionaron a conductores por hacer varios desplazamientos en un mismo día, unas veces por aceite y, una hora después, a comprar otro producto. Al igual que en el caso de repostar combustible, se le informa de la obligatoriedad de permanecer en sus casas, "a la segunda vez se sanciona", añadieron las mismas fuentes.
Los infractores suelen hacer viajes cortos, pero también hay excusas para desplazarse de la ciudad a la casa en el pueblo y viceversa. En este caso, la excusa más manida son las citas médicas en centros sanitarios. Según los datos que manejan los agentes, los infractores aprovechan los documentos que le expide el médico o la citación para moverse de un lado a otro, dado que muchos tiene el domicilio en la ciudad y en el DNI figura la dirección de su pueblo natal.
Las sanciones a los infractores se tramitan a través de la Subdelegación del Gobierno, que es la encargada de ejecutarlas. El Ministerio de Interior ya estipuló las cantidades que serán impuestas en aplicación de la Ley de Seguridad Ciudadana, conocida popularmente como la "ley mordaza". Un desplazamiento no autorizado es sancionado con 601 euros. Si el infractor es reincidente, entonces se le aplicaran el doble, 1.200 euros
Por desplazarse a una segunda vivienda son 1.500 euros y llevar menores, personas con discapacidad o en situación de vulnerabilidad en un vehículo sin causa justificada será sancionado con otros 1.500 euros. Por actividades no permitidas en establecimientos comerciales, 2.000 euros y por faltar al respeto a las fuerzas policiales otros 2.000.
La cuantía aún es mucho mayor por organizar o participar en celebraciones, un total 10.400 euros.
La Guardia Civil instaba a respetar la obligación de permanecer en los domicilios para no poner en riesgo la vida de uno y de los demás.
