Jueces, abogados y fiscales critican la medida porque "resta estabilidad y ensombrece" al servicio
El Servicio de Mediación Familiar Intrajudicial ha tocado techo en Ourense, al menos por el momento. Un cambio de fórmula del Colexio de Psicólogos de Galicia paralizó los trámites del sistema el pasado 1 de enero. Y es que, con el nuevo año, los psicólogos (una de las partes mediadoras en el proceso) empezaron a rotar mensualmente, una medida que no apoyan los otros actores: jueces, fiscales y abogados. El servicio no está operativo porque "la medida le resta estabilidad", apuntó la decana del Colegio de Abogados de Ourense, Pilar López-Guerrero. Así lo dijo ayer en la presentación de la memoria de los cinco años de funcionamiento la mediación familiar intrajudicial en Ourense, creada en 2010. "Ahora el miedo es que el trabajo tienda a ser abocado y se pierda esta vía de resolución de conflictos", explicó López Guerrero.
El mismo punto de vista lo compartió el fiscal jefe, Florentino Delgado, quien defendió un sistema que dote a la estructura "de solidez y eficiencia". Así, dijo, "estamos lejos de la estabilidad en la institución y en las personas que se atienden". Delgado hizo hincapié en que el servicio "merece la pena" y "ahorra dinero porque ahorra conflictos". Consideró estas dos pautas como base para "seguir adelante". En esta línea, el fiscal jefe apuntó que "hasta ahora hemos funcionado bien y es el momento de continuar con el crecimiento". La rotación propuesta por los psicólogos "ensombrece el servicio a la ciudadanía y desde la fiscalía nos negamos", explicó, añadiendo que "no tiene sentido que el propio sistema permita la disfunción".
El presidente de la Audiciencia Provincial, Antonio Piña, expuso el punto de vista de los jueces. "El magistrado deriva asuntos porque cree en el servicio de mediación. Si hay profesionales distintos, es difícil ofrecer un sistema de calidad".
Por todo ello, José Antonio Varela, del equipo interdisciplinar, explicó que los juzgados "deciden cautelarmente no derivar asuntos".
La desconformidad fue ya manifestada a la Xunta desde el Colegio de Abogados, haciendo llegar las "dudas de su eficacia", apuntó la decana. "Esperamos una respuesta favorable, teniendo en cuenta que, a excepción de los psicólogos, todas las partes abogamos por lo mismo".
