Cóctel de sensaciones tras el anuncio del Sergas de que el paritorio de Verín estará de nuevo operativo en los primeros días de febrero tras la contratación de dos pediatras para el hospital. Aunque la satisfacción es unánime entre todos los actores, ya sea políticos o del ámbito sanitario, por conseguir revertir el cierre del servicio, la oposición y representantes de los trabajadores en Verín exigen responsabilidades, ya sea con dimisiones o pidiendo perdón. Mientras, desde el PP se insiste en que la seguridad ha marcado siempre la línea de acción del Sergas.
Una de las pediatras que garantiza el Sergas, según la información de los profesionales de Verín, es una mujer que trabaja en un centro fuera de la provincia y que dejará su puesto de trabajo para incorporarse al hospital comarcal. Javier Castrillo, jefe de Ginecología del hospital de Verín, ve "muy positiva" la noticia de la reapertura del paritorio. Teme que la solución del área sanitaria con la contratación de dos pediatras sea "pasajera", ya que “no tenemos información de uno de los contratos y puede ser que sea el pediatra que antes cubría las guardias". Apunta que "lo ideal es que se contrataran tres y no dos" y "a partir de verano veremos qué hacer". "Esperamos que e no les vuelvan a entrar las ganas de tomar una medida tan impopular", añade.
José Luis Jiménez, presidente del Colegio Médico de Ourense, apunta al "error enorme de todo el proceso" y ve la reapertura como "una decisión política no basada en criterios técnicos, sino en cálculos electorales. Me parece lamentable". Mientras que el cierre inicial fue "una decisión apoyada en informes técnicos profesionales". Jiménez recuerda lo "desagradable" del proceso en el que "algunos de nuestros pediatras sufrieron tratos inaceptables". Jiménez se pregunta si, ahora, "todas las demandas de asistencia pediátrica en Ourense y Galicia van a ser solucionadas igual, pero me temo que no".
La portavoz de la comisión delegada de Verín, Eva Fernández, ve "positiva" la decisión, "un logro de toda a poboación, véndose que estando unidos se consiguen cousas". Con todo, asegura que mantendrán el cierre "ata que estea aberto" y pide la dimisión del gerente del CHUO, Félix Rubial: "Quedou desacreditado porque non dicía que non se podían atopar pediatras".
Mientras, el presidente de la Diputación, Manuel Baltar, habla de "una magnífica noticia" con la reapertura, recordando que es "algo que defendemos dende o minuto un, porque Verín debe contar cun servizo esencial, motivo polo que nos opuxemos ó peche", indicando que la Diputación aprobó por unanimidad pedir la recuperación de la atención de los partos en el centro verinense.
El secretario provincial del PSOE, Rafael Rodríguez Villarino, subraya la "lucha del pueblo, de la comarca y del personal sanitario para conseguir esta victoria", exigiendo al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, "una excusa pública porque fue el que decidió el cierre con argumentos falsos, en una clara medida política que rectifica por la ciudadanía y la cercanía de las elecciones".
Desde el BNG, Noa Presas felicita también a los que se movilizaron, esperando que "os responsables pidan disculpas porque viuse que era un problema de vontade política, demostrándose que querían tomar ás mulleres por imbéciles".
También se pronunciaron En Marea y el Grupo Común da Esquerda. Luis Villares habla de "unha victoria esperanzadora de toda a cidadanía frente a década ominosa de Núñez Feijóo" y Luca Chao exige la dimisión del conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, "o responsable dos despropósitos destes dous meses". n
