El sector servicios fía la campaña de Navidad a la recuperación sanitaria

El sector servicios encara el último trimestre de un año atípico, marcado por la situación epidemiológica de la provincia. Hostelería y comercio se muestran prudentes ante la cercanía de la época navideña, y fían a la situación sanitaria el efecto de la campaña. "Día a día" es la frase más repetida ante la incertidumbre del qué pasará en las próximas semanas. Las actuales restricciones de movilidad y de reuniones de no convivientes complican el escenario de los restaurantes, que esperan como agua de mayo la mejora de los datos de contagios. El comercio, por su parte, se plantea una campaña navideña cauta, sin los aprovisionamientos de otros años. El mundo online La irrupción del covid y el confinamiento obligaron a los comerciantes a buscar en el mundo digital una oportunidad para sus negocios. En la tienda Nuria Vidal, en el centro de la ciudad, apuestan desde hace meses por sorteos online, a través de las redes sociales. "Ahora estamos a la espera de cómo evolucione la situación sanitaria, teníamos pensado hacer algo especial por Navidad, pero habrá que ver qué pasa", explican. Raquel Guerra, de Enou, también compagina la actividad online con la tienda física, así como con talleres de artesanía. De cara a los próximos meses, cruza los dedos: "Noviembre siempre es un mes muy malo, junto con febrero. Siempre digo que lo único bueno de noviembre es que después viene diciembre, pero si este año no mejora...". La incertidumbre marca la hoja de ruta de los comerciantes, que evitan adelantarse a los acontecimientos. "Está todo tan en el aire, pueden cambiarnos tantas cosas en solo una semana... Yo tengo en pausa el pedido de refuerzo para Navidad, dependerá de lo que pase hasta diciembre", asegura Roseta Miguelez, encargada de Momo, que también cuenta con página web. "Nunca sabes cómo va a responder la gente: en mayo pensamos que no habría muchas ventas, y fue al revés. Si en Navidad la gente no gasta en cenas, a lo mejor decide hacer mejores regalos, quién sabe", reflexiona Miguelez. Guerra, por su parte, apunta: "Que no haya cenas también nos afecta a nosotros. Muchos grupos de amigos hacen regalos de amigos invisibles, lo que nos supone muchas ventas". El sector se esfuerza en buscar nuevas fórmulas de atraer al cliente, y recuerda: "El pequeño comercio es lo que mantiene viva una ciudad, a las grandes marcas les da igual cerrar las tiendas físicas". En hostelería, prudencia "Estábamos trabajando muy bien, pero a partir del tema de Ourense, de las restricciones en la ciudad, poco a poco fue afectando y ahora parece que la gente rehúye de la provincia", señala Marco Varela, de Casal de Armán. La hostelería capea el temporal y prefiere no pensar a largo plazo, bajo la preocupación constante de qué nuevas restricciones pueden imponerse en los próximos meses. "Me cuesta pensar que la hostelería sea la gran culpable, la verdad", comenta Varela. "Sería mejor que nos confinasen si la situación no cambia, pero que nos cerrasen a todos, no solo a nosotros, no creo que sea la solución", apunta Francisco Molanes, del restaurante Shangri-la. En su caso, el comedor funciona a medio gas desde la restricción de las reuniones: "Entre semana notamos mucho bajón, porque venían muchos compañeros de trabajo". De cara a diciembre, difícil: "La Navidad está claro que no va a ser la de todos los años, dudo que podamos juntarnos para esas". Marco Varela: "No creo que las cosas cambien mucho hasta el mes de diciembre" Marco Varela, de Casal de Armán, duda que la situación de la provincia mejore a corto plazo: "Es algo cíclico, lo dicen los expertos. No creo que las cosas cambien mucho hasta diciembre". Varela es claro: "Hay que ceñirse a las medidas sanitarias, no hay otra". Raquel Guerra: "Las navidades son siempre un colchón para varios meses" El último trimestre del año es el más esperado por el comercio local, que mira con preocupación los datos. "Las navidades son siempre la mejor época, un colchón para tirar varios meses. A ver qué pasa este año", se pregunta Raquel Guerra, de la tienda Enou.