Licita la redacción del proyecto para un nuevo edificio de hospitalización y el arreglo del Materno
Paso adelante para hacer realidad la siguiente fase de ampliación del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), en la que está prevista una inversión en el entorno de los 64 millones. El Sergas licitó ayer la redacción del proyecto básico y de ejecución para reprogramar el Plan Director, un contrato que contará con un presupuesto de casi 874.000 euros y que la empresa adjudicataria deberá ejecutar en un plazo de cuatro meses una vez formalizado.
El objetivo de este proyecto, presentado en diciembre en el Auditorio Municipal y cuyas obras se prevé que arranquen a lo largo de 2020, es dotar al conjunto del complejo de nuevos núcleos de comunicación que permitan independizar los flujos internos de los ambulatorios, la construcción de un nuevo edificio de hospitalización de 11 plantas entre el inaugurado en 2017 y el Materno-Infantil, espacio que también se mejorará para adaptarlo a nuevas necesidades, por lo que se descarta su demolición.
"Confírmase o compromiso da Xunta cun edificio que é fundamental para seguir avanzando na confortabilidade dos pacientes e ordenar os circuitos de comunicación", destaca el gerente del CHUO, Julio García Comesaña, que explica también que los profesionales sanitarios tendrán mucho que decir en el diseño del proyecto que se llevará cabo: "Iniciaremos xa os traballos con eles, utilizándose as súas aportacións porque son os que mellor coñecen as carencias e queremos un hospital axeitado para o seu traballo".
También se congratuló por la licitación de la redacción del proyecto el PP de Ourense, calificándola como "unha inmellorable noticia para a cidade, un paso moi importante no noso proxecto porque Ourense conte coas mellores dotacións sanitarias, que dean a resposta ao que os cidadáns solicitan e merecen", dijo Jesús Vázquez.
El plan director, pendiente de otras obras
En la reformulación del Plan Director, el Sergas también contempla otras dos fases para ejecutar en su totalidad la ampliación del CHUO, cuyo desarrollo quedará pendiente para los próximos meses y que supondrán una inversión de unos 48 millones.
Por un lado, una vez que esté disponible una nueva ala de hospitalización, se procederá a reformar el Hospital Cristal, que pasará a tener dos usos: apoyo clínico y consultas externas.
La última fase, por su parte, estaría destinada a la construcción de un nuevo edificio administrativo y otro docente, servicios que en la actualidad se encuentran desperdigados por múltiples localizaciones.
No se descarta, asimismo, la ampliación del bloque quirúrgico, que podría darse en vertical o en horizontal.
