Plataformas en streaming y canales en abierto compiten por el público invirtiendo grandes presupuestos en el lanzamiento de estrenos y nuevas temporadas
No es un género nuevo pero se está reinventando su forma de consumo. Las series de televisión, que nacieron prácticamente al mismo tiempo que el medio, han dejado de ser ese espacio de ficción con el que una cadena de televisión convoca semanalmente a sus fans, para convertirse en objeto de maratones, a veces compartidos, en los que se despacha una o más temporadas en un fin de semana.
Un fenómeno que comparte fundamentalmente la generación millennial, gracias a las plataformas de televisión en streaming y también gracias a las redes sociales el nuevo formato de boca a boca por el que unas series alcanzan más notoriedad y ganan espectadores frente a los telefilmes y la emisión de películas cinematográficas en estreno televisivo.
No es casualidad que en las cadenas generalistas fíen buena parte de su negocio publicitario al éxito de las series que producen, sobre todo en Estados Unidos, donde acaba de celebrarse la semana de los “upfronts” en los que las seis grandes cadenas norteamericanas (CBS, ABC, Fox…) presentan sus parrillas para la próxima temporada 2018-19 con un catálogo de 80 nuevas series.
Muchas de ellas llegarán también al público español, pero a cambio, otras tendrán que dejarles sitio. Se calcula que en este año las productoras norteamericanas le pondrán punto final a cuarenta títulos.
Las más caras
La apuesta por las series es cada vez más fuerte. Lo demuestran los altísimos presupuestos con los que se producen. Y a día de hoy, ya no son las televisiones tradicionales las que más invierten en este producto, sino las plataformas de pago. Netflix, que ya ha superado holgadamente el millón de abonados en España es la que más presupuesto maneja para sus series estelares, como “The Crown”, un repaso al reinado de Isabel II de Inglaterra, del que ya tiene en parrilla dos temporadas y pronto estrenará la tercera.
The Crown, con 130 millones de dólares para su primera temporada se convirtió hasta el momento en la serie más cara de la historia, desbancando a Juego de Tronos, de HBO que con diez millones de dólares de media por capítulo se ha quedado en un nada desdeñable tercer puesto.
La serie británica firmada por Netflix que recrea la vida de Isabel II desde su boda y posterior coronación hasta el presente en un recorrido que durará según las previsiones de la plataforma telivisiva seis temporadas, de las que ya están disponibles dos, la primera de ellas estrenada en noviembre de 2016.
Recientemente la actriz protagonista Claire Foy, que encarna el papel de la reina recibió una indemnización de 200.000 libras de la productora para poner fin a la brecha de género que suponía que siendo la protagonista indiscutible de la serie hubiese recibido un sueldo menor que su pareja, Matt Smith, quien encarnó en las dos primeras temporadas el papel del Duque de Edimburgo
No siempre un alto presupuesto es garantía de éxito. La segunda más cara, también producida por Netflix, “The Get Down”, una historia del nacimiento del hip hop y el rap, firmada por Baz Luhrman, el director de Moulin Rouge, tenía todas las bazas en su favor: una historia atractiva, gran despliegue de medios y un director de impecable trabajo. Sin embargo se quedó en la primera temporada, después de haber manejado un presupuesto que superó los 120 millones de dólares.
En el extremo opuesto de la lista, encontraríamos a la más barata de la historia. Y ahí encaja una producción española cuya primera temporada, de cinco capítulos, se rodó en menos de diez días: “Paquita Salas”, firmada por Javier Calvo y Javier Ambrossi, conocidos como “los Javis”, directores de la película “La llamada”, cuentan la historia de una representante de artistas que no se ha adaptado al paso del tiempo.
Un personaje entrañable y divertido que en formato de parodia describe los sinsabores de un oficio que rara vez traspasa el anonimato. Nacida en Flooxer la serie pasó a Netflix, que ya está a punto de estrenar su segunda temporada y tiene una tercera en preparación. No es casualidad el salto ya que se convirtió en trending topic en julio de 2016, cuando se estrenó en la plataforma digital de Atresmedia.
Las más vistas
Resulta difícil establecer un ranking de cuáles son las series más vistas porque según diferentes fuentes aparecen distintas valoraciones y estadísticas. Según la web Adslzone, que toma como referencia el volumen de descargas realizadas , considera “Juego de Tronos” como la serie más vista, tanto por el volumen de descargas, incluyendo las de las plataformas piratas, como por su disponibilidad en la plataforma HBO y Movistar+, antes Digital +. En el mismo ranking ocupa el segundo lugar “The walking dead” y “The Big Bang Theory”, el tercer puesto.
En Estados Unidos, The Big Bang Theory fue la serie más vista en abierto, es decir televisiones para las que no hace falta pagar, durante el año 2017, con una media de 18 millones de espectadores.
Por plataformas, “Stranger Things”, The Crown” y “Por trece razones” se encuentran entre las más vistas en Netflix. “Juego de Tronos” y “Westworld”, la versión seriada de la película homónima de la década de 1970, las dos más vistas de HBO
Pero en España, ambas plataformas refferidas todavía son minoritarias. Según el Panel de Hogares que publica periódicamente la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, Movistar + es la plataforma de televisión de pago con más usuarios, el 60 por ciento de los más de seis millones que existen en España. En Galicia, el porcentaje de usuarios de televisión de pago está en torno al 12 por ciento y en la provincia de Ourense, con 31.208 , en el 9,9 por ciento.
El mismo estudio de la CNMC señala que uno de cada cuatro hogares con acceso a internet, utiliza su conexión para ver contenidos televisivos al menos una vez a la semana y de ellos, casi el cincuenta por ciento utiliza los sistemas de televisión a la carta para ver un capítulo o más de una serie.
Además de Netflix y HBO, existen otras plataformas audiovisuales, como la que oferta Amazon Prime Video, que por menos de veinte euros al año ofrece en un mismo paquete los envíos gratuidos de las compras que se realicen en Amazon Prime y un catálogo de series, documentales y películas con el que intentan captar a un mayor número de usuarios dentro de su incipiente y poco divulgada plataforma.
España cuenta con una plataforma propia, que está en activo desde 2008, Filmin. Su nombre nos revela que nació más como una apuesta para ver películas en streaming, pero la tendencia de las series llegó también a su catálogo, aunque no dispone de producción propia y su presencia en el mercado, abrumado por las grandes multinacionales, se ha quedado en un plano muy testimonial.
Otro de los productos con más antigüedad es el de Wuaki tv, hoy llamado Rakuten Tv, tiene dos opciones de uso: el de videoclub en streaming, tanto para series como para películas, con un amplio catálogo en estas últimas, que incluye novedades y clásicas, y el de pago mensual de un paquete Selección en el que incluye series y algunas de las películas de su catálogo más extenso
Fuera de estos contenedores audiovisuales la oferta de televisión bajo demanda y de series se completa con las que ofrecen Orange, Vodafone y el resto de los operadores telefónicos que ofertan a sus clientes de adsl y fibra paquetes de televisión con distintos formatos, desde los básicos que incluyen canales específicos de series como Fox, AXN, Calle 13, Cosmo, etcétera, de los que abren la posibilidad, al igual que Movistar + de disponer de series a la carta.
Las series españolas
El peso de las series también se nota en las televisiones nacionales, que cada vez apuestan por productos de más calidad. Al más reciente del catálogo, “La catedral del mar” estrenado esta misma semana en Antena 3, hay que sumarle el de “Otra mirada” de Televisión Española, también en antena, “Fariña”, uno de los mayores éxitos televisivos de los últimos tiempos, ambientada y producida en Galicia, “Estoy vivo” o “El Ministerio del Tiempo” y “La casa de papel” que han pasado de su emisión en abierto en TVE y Antena 3 a Netflix que no solo recupera producciones ajenas sino que también realiza las suyas propias, como “Las chicas del cable”, la primera serie española realizada para una plataforma en streaming.
