Las fiestas navideñas son una de las épocas con mayor incidencias en la carretera, ya que en el mes de diciembre la accidentalidad aumenta un 10%. La Dirección General de Tráfico, la Guardia Civil, los bomberos y la Policía Local realizaron ayer un simulacro en el que se planteaba un accidente de tráfico con víctimas mortales.
La iniciativa pretendía concienciar sobre el peligro que supone beber al volante. El subdelegado del Gobierno en Ourense, Emilio González, instó al “sentido común” a la hora de desplazarse y alertó sobre el consumo de alcohol y drogas vinculado a las celebraciones y su impacto en la conducción.
La presentación contó con la participación del jefe provincial de Tráfico de Ourense, David Llorente, y el teniente de la Guardia Civil de Tráfico en Ourense Javier Barja. Por su parte, Llorente explicó que “los trayectos cortos y conocidos son los que más incidencias provocan estos días”.
“Ya llevamos 13 fallecidos en la provincia, doce en carreteras interurbanas y uno en la ciudad. Son cifras regulares porque en una provincia como la nuestra el objetivo tiene que ser el de cero víctimas”, explicó.
Al simulacro también acudió Daniel Fernández Carril, quien perdió una pierna al ser arrollado por un conductor que conducía bebido. El infractor se salió del carril y embistió a Fernández Carril, quien iba en moto. “Agora teño que pelexar con todo na miña vida e vivir con dor” , explica. “Estrañas a vida anterior e perdes calidade de vida por algo que non foi culpa miña”, añadió. Ahora, el joven recorre colegios y se dedica a participar en iniciativas como el simulacro porque “non existe conciencia sobre o perigo na carretera ata que pasa algo malo”.
