El impago de las indemnizaciones a las víctimas del llamado crimen de Godás -el asesinato de Agustín Reinoso por parte de su yerno en 1997- hace que este asunto aún colee por el Pazo de Xustiza de Ourense 12 años después. El 28 de abril se celebrará en la Audiencia una subasta pública de 53 inmuebles (casi todas pequeñas parcelas de escaso valor) para reunir los 197.280 euros que aún adeuda en concepto de responsabilidades civiles a la hija, los padres y la que fuera compañera sentimental del fallecido.
Doce años después, el crimen de Godás, aunque ya sentenciado, aún colea por la sección penal de la Audiencia de Ourense. El asesinato del carballiñés Agustín Reinoso por parte de su yerno, Claudio Ríos Rodríguez, comenzó con connotaciones especiales que saltaron al papel couché (la hija del muerto defendía la inocencia de su marido); continuó con contratiempos varios (recursos y fallos contradictorios) y, a pesar del tiempo transcurrido, la sentencia está ejecutada a medias. El inculpado, en la cárcel en virtud de la condena más dura impuesta en Ourense por un jurado popular, aún no satisfizo las indemnizaciones a la familia del fallecido, entre las que figura la esposa de Ríos, quien proclamó hasta la saciedad su inocencia.
La sala de vistas de la Audien cia acogerá el 28 de abril una vista pública para subastar un lote con 53 inmuebles -casi todo fincas- cuya titularidad recae en Claudio Ríos con el fin de aminorar la reclamación de 197.280 euros en concepto de responsabilidades civiles. Aunque las indemnizaciones que recogía la sentencia alcanzaban los 127.000 euros hay que sumarle los intereses por en el tiempo y las costas judiciales (los honorarios de los abogados que ejercieron la acusación particular en representación de los padres del muerto y su compañera sentimental).
Los bienes que saldrán a subasta están situados en Irixo y en el Ayuntamiento de Hermisende (Zamora). El inventario incluye prados, montes, frutales, fincas así como tierras de regadío de escaso valor económico, si bien el lote también incluye una vivienda habitable de dos plan tas (84 metros cuadrados cada planta), valorada en 17.669 euros, y un garaje de 3.203 euros, ambas construcciones situadas en la localidad de La Tejera. En una subasta previa ya se pujó por una vivienda del inculpado.
Cumple condena con permisos
Pocos casos han dado tanto que hablar e instruir desde el punto de vista penal como el de Claudio Ríos, condenado a 17 años y medio de cárcel y que fue objeto de múltiples recursos: pasó por el TSXG (anuló el juicio); el Supremo (lo dejó como estaba) y el Constitucional (no admitió el amparo).
El condenado por matar de un disparo a su suegro el 26 de marzo de 1997 a la salida de Godás cumple la pena en la cárcel de Pereiro en segundo grado, aunque disfruta de permiso en el exterior.
Él siempre se declaró inocente, alegando que un ciudadano alemán había sido el autor de dos disparos -uno alcanzó a la víctima por la espalda- y que después lo secuestró.
La sala de vistas de la Audien cia acogerá el 28 de abril una vista pública para subastar un lote con 53 inmuebles -casi todo fincas- cuya titularidad recae en Claudio Ríos con el fin de aminorar la reclamación de 197.280 euros en concepto de responsabilidades civiles. Aunque las indemnizaciones que recogía la sentencia alcanzaban los 127.000 euros hay que sumarle los intereses por en el tiempo y las costas judiciales (los honorarios de los abogados que ejercieron la acusación particular en representación de los padres del muerto y su compañera sentimental).
Los bienes que saldrán a subasta están situados en Irixo y en el Ayuntamiento de Hermisende (Zamora). El inventario incluye prados, montes, frutales, fincas así como tierras de regadío de escaso valor económico, si bien el lote también incluye una vivienda habitable de dos plan tas (84 metros cuadrados cada planta), valorada en 17.669 euros, y un garaje de 3.203 euros, ambas construcciones situadas en la localidad de La Tejera. En una subasta previa ya se pujó por una vivienda del inculpado.
Cumple condena con permisos
Pocos casos han dado tanto que hablar e instruir desde el punto de vista penal como el de Claudio Ríos, condenado a 17 años y medio de cárcel y que fue objeto de múltiples recursos: pasó por el TSXG (anuló el juicio); el Supremo (lo dejó como estaba) y el Constitucional (no admitió el amparo).
El condenado por matar de un disparo a su suegro el 26 de marzo de 1997 a la salida de Godás cumple la pena en la cárcel de Pereiro en segundo grado, aunque disfruta de permiso en el exterior.
Él siempre se declaró inocente, alegando que un ciudadano alemán había sido el autor de dos disparos -uno alcanzó a la víctima por la espalda- y que después lo secuestró.
