La lluvia caída en la ciudad provocó que en un edificio de la calle Portocarreiro cayeran cascotes a la calzada. Por suerte, en ese momento no pasaba nadie por allí y no provocó daños personales. Hasta la zona se desplazaron los bomberos de Ourense.
La lluvia caída en la ciudad provocó que en un edificio de la calle Portocarreiro cayeran cascotes a la calzada. Por suerte, en ese momento no pasaba nadie por allí y no provocó daños personales. Hasta la zona se desplazaron los bomberos de Ourense.