Como es habitual en los principales concellos de la provincia, el año arrancará con la "congelación" de tasas e impuestos como nota predominante de los consistorios, aunque con varias excepciones, especialmente la que tiene que ver con el recibo de la recogida de basura, que sufrirá modificaciones en la mayoría de los ayuntamientos por los cambios introducidos por Sogama, que ha ofrecido a los municipios una reducción del canon que les cobra por tratar la basura a cambio de trasladar esa bajada a los contribuyentes.
Es el caso, por ejemplo, de la ciudad de Ourense, que validó definitivamente en otoño la modificación de la ordenanza fiscal reguladora del servicio de recogida de basura que facilita los cambios en las condiciones y la reducción del recibo.
Este cambio es el único que ha impulsado el Concello de la capital tras dos años consecutivos en los que el tipo de gravamen del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) se reducía un 20% (un 10% en cada ejercicio) tras el acuerdo político alcanzado en el verano de 2017 entre PP y Democracia Ourensana, ahora sin margen para tocar más tributos para que afecte a los ingresos.
Sí habrá cambios en los recibos del IBI en Carballiño, que aprobó hace unas semanas definitivamente una bajada del 20% en el recibo, además de la reducción de algo más del 8% en la basura, permaneciendo el resto de tasas congeladas, tónica similar a la de O Barco, Ribadavia o Bande, donde los precios públicos permanecerán invariable a excepción de la basura, con menos carga para los ciudadanos.
Por el contrario, sí hay un ligero aumento del IPC en Allariz con el servicio de agua y saneamiento, una subida que según el gobierno local apenas se notará en el bolsillo de los ciudadanos.
En el caso de Xinzo de Limia se actualizará el IPC del contrato establecido con Viaqua, que subiráel suministro de agua un 0,9%. En lo que respecta al la basura, subirá alrededor de cinco euros al año debido a una actualización que se tuvo que hacer y que según la regidora, Elvira Lama, llevaba sin hacerse más de cinco años. Sobre la subida se aplicó la rebaja que exige Sogama.
Mientras, Verín congelará "en principio" los impuestos y a lo largo de 2020 se revisarán. Debido a que la basura dejará de estar mancomunada y se acometerá con servicios propios el gobierno local hará un estudio de costes reales para aplicar la rebaja si procede. "La idea no es subir impuestos, en todo caso", según aseguró el alcalde, Gerardo Seoane.
