La Dirección General de Tráfico tramitó 1.926 denuncias en todo 2022 a conductores de la provincia que llevaban vehículos sin seguro o con la ITV en condiciones desfavorables. Los coches estaban en circulación cuando la Guardia Civil los detectó sin la documentación necesaria.
Con todo, en los dos últimos años, el número de multas disminuyó casi a la mitad. En 2020, no tener los papeles en regla le pasó factura a 3.133 personas. Los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) señalan que la mayoría de las denuncias son por circular con la ITV caducada o, también de forma común, desfavorable. En este caso las multas ascienden a 200 euros y a partir de los dos meses, la cuantía es de 500. Los vehículos con este permiso desfavorable, solo pueden circular desde el taller a la estación para reparar sus desperfectos y viceversa.
Los coches "zombie"
Los coches zombie son aquellos que se encuentran en situación de baja temporal y que, por lo tanto, no pueden circular. Se trata de aquellos vehículos sin Inspección Técnica de Vehículos (ITV), sin seguro y sin ningún tipo de incidencia en los últimos 10 años -ya que es una forma de demostrar que no han estado en circulación-, cuyos datos aportan los servicios centrales de la DGT y se cruzan con los de los municipios, que señalan aquellos que llevan también más de 10 años sin abonar el impuesto correspondiente. En 2021, la DGT cambió el Reglamento General de Vehículos y marcó un año como límite para estar de baja temporal.
Desde entonces, Tráfico apuró a fiscalizar las situaciones de los automóviles. En los últimos diez años dieron de baja de oficio a 613 de coches zombie de la provincia de Ourense, incrementándose en más de cien en solo un trimestre.