El Centro Cultural Marcos Valcárcel inaugura esta tarde, a partir de las 20.30 horas, una completa exposición sobre los Rolling Stones patrocinada por La Región, la Diputación provincial y el Ourense ICC Week, aunque abre sus puertas al público general mañana y se clausura el 15 de octubre. Todas las piezas, alrededor de 400, pertenecen al barcelonés Alberto Sánchez-Runde. El coleccionista comenzó a recopilar todo tipo de objetos relacionados con la banda a los 12 años, cuando su madre le regaló el disco "Aftermath".
Al principio su colección crecía despacio, a ritmo de un vinilo cada tres o cuatro meses, cuando conseguía ahorrar lo suficiente. Eran tiempos sin internet, y Sánchez-Runde sentía una fascinación en aumento por sus ídolos. Como ha reconocido a La Región, por aquel entonces "cada foto que se publicaba era algo extraordinario, eran personajes inalcanzables".
Con los años, su casa se le quedó pequeña y alquiló un local, llegando a proteger las piezas más valiosas con cámaras de seguridad. Ahora llega a Ourense esta singular exposición, catapultada desde su éxito en Ibiza con cientos de visitantes cada día.
De forma simbólica, el recorrido comienza con aquel "Aftermath", que motivó a Sánchez-Runde una pasión que mantendría intacta toda su vida. También están presentes joyas como una guitarra firmada por Ron Wood, estrella de la colección, o el vinilo de"Sticky Fingers", con una portada que lleva la rúbrica de Andy Warhol y fue censurada en España por la dictadura franquista. Otras paradas obligadas son los carteles de sus giras por Asia, el vodka de coleccionista con botellas calavera y los discos pirata grabados sobre radiografías, para evitar la censura soviética cuando la música occidental estaba prohibida.
El grupo inglés comenzó con versiones de blues y alcanzó el estrellato con "(I Can't Get No) Satisfaction", tema que Keith Richards compuso mientras descansaba en una habitación de hotel. Se levantó, grabó uno de los riffs de guitarra más famosos de la historia en un cassete y se volvió a dormir.
La trayectoria de "sus satánicas majestades", que no llegaron a Galicia hasta el 98, es el de la música y el mundo modernos. Siempre incombustibles, los Stones han sobrevivido a todo, incluso a caídas de cocoteros, ganándose un lugar preferente en el Olimpo del rock desde sus inicios en los 60 de la mano de Mick Jagger, Keith Richards, Bill Wiman y Charlie Watts, uniéndose a lo largo de su larga historia talentos como Brian Jones, muerto ahogado a los 27 años en extrañas circunstancias, y Ron Wood, aún en activo junto con Jagger, Richards y Watts. Tras su imagen de eternos rebeldes se escondía una gran profesionalidad.
