MORTALIDAD

Los tumores están detrás de una de cada cuatro muertes

Las defunciones por enfermedades del sistema circulatorio se reducen, pero son la causa más habitual 

La provincia certificó durante el año 2017 un total de 4.693 defunciones, una cifra ligeramente superior a del año anterior y que es producto de una larga lista de causas que el Instituto Nacional de Estadística desglosa en un análisis publicado recientemente que arroja que las principales causas de muerte son las enfermedades del sistema circulatorio, que pese a caer un 6,81% en la comparativa interanual suponen un total de 1.395, y las distintas clases de tumores, que con un crecimiento del 2,87%, provocan una de cada cuatro defunciones en la provincia, aunque no afectan por igual a hombres y mujeres. Según los datos difundidos por el INE, de las 1.183 muertes por tumores, un total de 730 son de varones, algo más del 61%.


Clases


Asimismo, atendiendo a la tipología de estos, el tumor más habitual que terminó provocando la muerte fue el maligno que afecta a tráquea, bronquios o pulmón, presente en 213 personas, de las que la gran mayoría (186) eran hombres. Le siguen en la clasificación los de colon (117 casos), páncreas (68) y próstata (65). Entre los que más aumentaron en la comparativa con 2016 está el cáncer de mama, causa de 63 muertes y que afecta casi en su totalidad a las mujeres, con 60 casos.

Mientras, en lo que respecta a las enfermedades del sistema circulatorio, la distribución entre sexos es más equilibrada, con 772 casos de mujeres y 623 de hombres.
Las enfermedades cerebrovasculares (trombosis, embolia, hemorragia cerebral o aneurismas) estuvieron detrás de 360 casos, mientras que la insuficiencia cardíaca fue la causa de 179 defunciones y el infarto agudo de miocardio de 142.


Evolución


Se han reducido notablemente, más de un 45%, las defunciones provocadas por enfermedades endocrinas como la diabetes mellitus (de 112 a 76 casos), o las provocadas por causas externas, que cayeron cerca de un 20% por la disminución de los accidentes de tráfico (aunque en 2018 volvieron a repuntar), las caídas accidentales o los ahogamientos.

Por el contrario, se ha percibido un incremento de los suicidios, pasando de 32 a 37. Este fenómeno tiene una especial incidencia en la provincia, ya que se supera con creces la tasa nacional, al estar por encima de los 10 por cada 100.000 habitantes.

Las enfermedades infecciosas, como la septicemia o las que afectan al intestino, han registrado también un importante incremento superior al 23%, registrándose el año 69 defunciones por estas dolencias. 

Una población más envejecida está provocando también cada vez un mayor número de defunciones relacionadas con este fenómeno, según se desprende de la estadísticas divulgada por el INE. Así, pese a que se reducen desde 2016 las muertes originadas por trastornos mentales orgánicos y seniles de 385 a 373, estas representan un 123% más que hace una década. El alzheimer, mientras, se cobró la vida de un centenar de residentes en la provincia, cuando en 2016 la cifra fue de 93, desvelan los datos del INE.
Dentro de la categoría en la que se engloban las muertes por senilidad también están las relacionadas con trastornos por el uso excesivo de alcohol, presente en ocho defunciones durante el año pasado, tres más que el anterior.

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