La compleja situación generada en el grupo municipal de Democracia Ourensana suma nuevos capítulos después de que el edil Telmo Ucha, que tomó posesión como no adscrito al margen del partido, plantee ahora su integración en la formación de Gonzalo Pérez Jácome, que de materializarse supondría equilibrar las fuerzas con el sector crítico, al que un auto judicial les reconoció la semana pasada su derecho a reintegrarse en DO como medida cautelar mientras no haya una sentencia sobre la validez de su expulsión.
Ucha, sin embargo, califica de "rumor" su vuelta a DO y se muestra en una clara ambigüedad. "Entiendo que es algo interno y personal y que no afecta a la situación política. Si bien es cierto que es tentenador el poder callar algunas bocas de próximos a todos los partidos, incluido DO", señala el concejal, añadiendo que "mi deber y derecho es asumir aquellas competencias de gobierno que me fueron delegadas sin tener que justificar o explicar si lo hago adscrito o no".
De fructificar su ingreso en DO podría coincidir con los ediles Miguel Caride, María Teresa Rodríguez y María del Mar Fernández Dibuja, aunque por el momento el secretario del Concello aplaza la decisión, al remitir un informe a estos tres concejales –que habían pedido volver a DO– pidiéndoles "exactitude" en su demanda, indicándoles que "non expresan con claridade que se solicita".
Desde este sector aseguran sentirse "sorprendidos" por esta comunicación, entendiendo que el auto judicial sobre las medidas cautelares es claro, por lo que deben recuperar su sitio en DO.
